“Acercarse a las Matemáticas te convierte en una persona distinta”. Fernanda de la Torre, alumna UG

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Guanajuato., Gto., 02 de diciembre de 2015.- Desde hace cinco años, María Fernanda de la Torre Robles, alumna del Departamento de Matemáticas de la Universidad de Guanajuato, colabora como entrenadora de los jóvenes que participan en la Olimpiada Mexicana de Matemáticas (OMM), como una manera de corresponder por todo lo aprendido en este certamen.

María Fernanda de la Torre Robles, Delegada en Guanajuato de la OMM.
María Fernanda de la Torre Robles, Delegada en Guanajuato de la OMM.

Actualmente es la Delegada en Guanajuato de la OMM, y organiza la fase Estatal del Concurso y, junto con los otros asesores, compartir con los alumnos de nivel medio herramientas teóricas, técnicas y los “secretos” que utilizan para resolver problemas matemáticos. “Los entrenadores nos volvemos cómplices -hasta cierto punto- de su crecimiento, porque los acompañamos y conocemos por varios meses, así que tratamos de guiarlos en todo lo que podamos, aunque no sea la olimpiada”, sostuvo.

Con la alumna UG al frente de la Delegación, este año los competidores del Estado de Guanajuato obtuvieron resultados históricos en la Olimpiada Mexicana de Matemáticas, pues los seis integrantes del equipo obtuvieron medallas. A nivel nacional, Guanajuato quedó en quinto lugar, la mejor posición que ha logrado a lo largo de casi 20 años. Además, la Delegación Guanajuato fue premiada con la Copa Superación, por el crecimiento que ha mostrado el estado durante tres años consecutivos.

Relató que su gusto “en serio” por las Matemáticas surgió cuando empezó a participar en los concursos: “Yo creía que sabía matemáticas, porque me sabía de memoria muchas fórmulas y muchos algoritmos, hasta que llegué a la Olimpiada y entonces vi que todo eso no me servía de nada si no sabía usarlo”, expresó.

La primera vez que enfrentó un problema de olimpiada fue usando la factorización de un número: “cosa que se aprende en la primaria, pero que ni idea tenía que fuera algo más que una fórmula para sacar dieces en las calificaciones”, comentó.

Su gusto por esta disciplina creció cuando en un taller que tomó en la preparatoria aprendió aplicaciones de esta ciencia, aunque al estudiar la licenciatura se enfocó en una parte muy abstracta de las Matemáticas, Topología de Bajas Dimensiones, en particular, la Teoría de Nudos.

Sin embargo, aseguró que las Matemáticas están relacionadas con lo que uno quiera: “Un matemático puede trabajar haciendo investigación, impartiendo cursos, en bancos, en el INEGI, programando videojuegos, colaborar en investigación social, química, física, biológica, económica con modelos matemáticos…”, abundó.

En opinión de María Fernanda, después de estudiar Matemáticas, uno ya no piensa igual que antes, cambia el orden en las ideas, se adquiere el gusto por pensar: “Yo creo que eso, yendo más allá del trabajo, es lo que hace especial a un matemático, su condición de reconocer cualquier situación como un posible problema a resolver, y su capacidad de expresarlo en un lenguaje distinto al de las palabras. Acercarse a las matemáticas, más allá de las calificaciones, de los trabajos, e incluso de los concursos, es una manera de volverse una persona distinta”, finalizó.

Actualmente, Fernanda de la Torres realiza una estancia de investigación en Marseille, Francia, con profesores de la Aix-Marseille Université, como parte de su trabajo de tesis.