Descubre su historia y la obra plástica bajo su resguardo
CULTURA/Guanajuato, Gto. 26 de diciembre de 2018.- El Museo del Pueblo es uno de los sitios custodiados por el Instituto Estatal de la Cultura (IEC) se ubica junto al Edificio Central de la Universidad de Guanajuato (UG), en una bellísima casona barroca del siglo XVII perteneciente a la familia Sardaneta y Legaspi, marqueses de San Juan de Rayas, quienes fueran grandes promotores del cambio social en Guanajuato.

De acuerdo al comunicado de prensa, como parte del Circuito Estatal de Exposiciones que tiene el honor de presentar Gobierno del Estado a través del IEC, se presenta: Alquimia de lo inefable, Ceguera y claridad, Unidad/Fundamentos de la creación procedentes para la paz; y Rubén Reséndiz, En Memoria.
En Alquimia de lo inefable, es la colectiva a través del cual podemos acceder a un goce estético y a muchos actos de reflexión conceptual y emotiva. Si bien disímbolos en sus temas y tratamientos plásticos, su trabajo se haya muy aparejado mediante sus concatenaciones emotivas para retratar lo inefable de su realidad. Ahí donde las palabras no bastan para hablar del amor, la pasión, el dolor, el odio o la muerte, la pintura y escultura han podido tender un puente de comprensión entre aquello que el hombre vive, goza, sufre y muchas veces no entiende de su vida.
Ceguera y claridad de Antonio Mañón ofrece sus ojos al espectador para que vea a través de ellos el trayecto interior que está realizando; proceso de autoconocimiento, de iluminación, de iniciación. Iniciación en el arte de la pintura, teniendo como maestros a los más grandes pintores-reveladores del arte universal: Velázquez, Rubens, Rembrandt, quienes mediante el dominio del dibujo, el color y la composición mostraron los más íntimos secretos de la condición humana.
Con respecto a la historia de este edificio, fue propiedad del Primer Marqués de Rayas, Don Vicente Manuel de Sardaneta y Legaspi, quien obtuvo el título nobiliario por sus pagos a la corona; entre sus obras destacan la aportación de la mitad del presupuesto para concluir la construcción de la cortina de la Presa de la Olla, la construcción del Mesón de San Antonio y la donación de la peana de plata de la virgen de Guanajuato.
En su interior del antiguo inmueble se encuentra la Capilla Barroca construida en 1775 por el primer Marqués de Rayas, Vicente Manuel de Sardaneta y Legaspi es indudablemente uno de los mayores tesoros de este conjunto arquitectónico ya que ostenta una bellísima portada barroca labrada en cantera rosa atribuida al destacado arquitecto Felipe de Ureña, con una composición iconográfica dedicada a “Los cinco señores”, Jesús, María, José, Santa Ana y San Joaquín, de especial devoción para la familia Sardaneta y Legaspi.
Originalmente, la capilla ostentaba un bellísimo retablo estofado construido también por Felipe de Ureña; Actualmente en su interior se encuentra un espléndido mural realizado por el Maestro José Chávez Morado titulado “Tríptico guanajuatense” que recrea pasajes del virreinato y del México independiente.
En la sala de enfrente se aprecia obra religiosa y civil de los siglos XVII, XVIII y XIX desatacando una bellísima “Cruz Tequitqui”, que se entiende como una manifestación artística de los indígenas “conversos” que mantenían oculta su antiguo culto luego de la conquista espiritual en Mesoamérica y que de una manera contundente resume el sincretismo religioso surgido del mestizaje.
La sala Hermegildo Bustos aborda la obra del pintor purimense conocido como el “Pintor del alma de un pueblo”. Hermenegildo Bustos destaca y sorprende por su formación autodidacta, cuya ausencia de academia no mermó en ningún sentido la enorme calidad de su trabajo plástico
Resalta “Retrato de familia”, en ella el genial pintor retrata con absoluta destreza y dominio del pincel a dos mujeres y un hombre cuyas miradas y atuendo sorprenden por su realismo e impecable ejecución que testifican la altura de un artista autodidacta que llevó el retrato popular del siglo XIX a niveles magistrales.
Destaca dentro del acervo contemporáneo de este recinto, la magnífica obra escultórica y de caballete de su fundador, José Chávez Morado; ilustre guanajuatense nacido el 3 de enero de 1909 por lo que perteneció a la generación de artistas marcados por los principios sociales de la Revolución mexicana.
Y en sus salas temporales se exhibe diversa obra de artistas de talla internacional que además forman parte del Circuito Estatal de Exposiciones, que se realiza tres veces al año durante los periodos vacaciones para ofrecer a los visitantes una amplia y diversa variedad de arte.