Charamuscas y Trompadas

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EL BALCÓN DEL PALACIO. Muchos de los diputados que acompañaron el 28 del mes pasado a los nuevos legisladores Ma. del Rocío Jiménez Chávez y Beatriz Eugenia Yamamoto Cázares y José Luis Vázquez Cordero, a la toma de protesta, comenzaron a sacar cuentas de los días porque resulta que Yamamoto está hospitalizada por COVID-19. 

En contraste, también entre los conocidos de la diputada suplente han comenzado a sacar cuentas porque hay quien asegura que uno de los sitios en donde sospechan pudo contagiarse es nada menos que en el Palacio legislativo, por aquello de los microbios, virus y parásitos que pudiesen encontrarse en el lugar. 

La diputada se viene a sumar a otros legisladores  prácticamente de todos los partidos que han tenido que luchar a brazo partido contra el coronavirus de manera personal, aunque hay algunos que han preferido mantener sus contagios en el anonimato, mientras que otros lo han hecho público en sus redes sociales, en un acto de responsabilidad. 

A la fecha no hay registro de casos graves entre los diputados, aunque se conoce que el diputado Isidoro Bazaldúa Lugo, también está combatiendo y ya lleva días en un hospital. 

IBARGÜENGOITIANAS, lo que está de programa cómico, trágico, musical es la pugna que se traen varios personajes en los partidos políticos de la entidad por alcanzar alguna candidatura o algún cargo público, aunque sea de aviador, perdón de regidor, o lo que caiga.  El chiste es seguir mamando de la ubre inagotable del erario público. Aunque hay quien asegura que eso es una desvergüenza impúdica. 

Ahí tiene a personajes como el ex alcalde Edgar Castro Cerrillo, a quien nadie le cree que haya renunciado a la posibilidad de ser regidor, porque es a lo único que aspiraría, según los priistas. Ya se imagina, Cristian Ortiz, el ex jefe de policía y subordinado de Castro, compitiendo por Movimiento Ciudadano, también por la alcaldía y no se diga el alcalde Alejandro Navarro, quien quiere un segundo periodo, pero no halla a quién dejar en el cargo, sin que le haga sombra, porque está más celoso que una novia de rancho y está convencido de que tiene la victoria en la bolsa. 

Otro que ya anda haciendo planes y levantó la mano para apuntarse es el diputado del Verde, Israel Cabrera Barrón, que es recordado por andar rescatando peces en la presa de Los Santos y ahora también por mandar a uno de sus asistentes a carrancearse  los periódicos de la sala de Prensa del Congreso, como si su sueldo de 195 mil pesos brutos al mes, no le alcanzara para comprar algunos ejemplares. 

Y MIENTRAS TANTO EN LA ATENAS DE POR ACÁ, lo que anda levantando mucha polvareda en los corrillos políticos, son las designaciones que se ha hecho en el PAN en el municipio capitalino y el exceso de confianza que muestran para la siguiente elección. 

La que dicen que va firme para el octavo distrito local, es la regidora panista Margarita Rionda de quien se recuerda un lío de tamales que llevó a su partido un día de la Candelaria, pagados con recurso público de apoyos sociales y el gran pleito con su asistente, a quien acusó de ladrona y ésta le sacó los trapos al callejón, dejando muy mal parada a la regidora y cuya amenaza de demanda por violencia de género o lo que resulte vuelve a estar latente. 

Hay exceso de confianza y soberbia, una pésima combinación en la cancha de la política cuando se pierde piso, dicen los más experimentados. 

De hecho, más allá de la ambición de Carlos Chávez Valdés y de Armando López, el empresario hotelero, de querer llegar a la alcaldía aunque sea por unos meses y de  manera interina, pondría en riesgo la eventual victoria del presidente Alejandro Navarro Saldaña para un segundo periodo, pero ellos ni el alcalde ni la dirigencia estatal albiazul y menos sus allegados ven ese escenario en el que en lugar de ganar de manera contundente lo haría casi de panzazo, dejando a la suerte el proceso electoral del 24.  

Igual se da la tercera y la vencida de Roberto Loya, que resultó con más templanza que sus ex compañeros albiazules, y ahora purificado por las aguas benditas de Morena.