Guanajuato, Gto. Después de un periodo de sequía que obligó al órgano operador del agua de Guanajuato a dejar de extraer agua de las presas para el consumo de la población, las lluvias recientes llenaron los embalses y permitieron nuevamente su explotación.
Juan Sebastián Ávila Victoria, presidente del Consejo Directivo del Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado, informó que las presas de la Soledad y Esperanza rebasaron el 100 por ciento de su capacidad.
Recordó que, a inicios del año, el SIMAPAG se vio obligado a extraer el agua para consumo humano, de la batería de pozos en Puentecillas, debido a los bajos niveles que presentaban las presas.

Precisó que estas acciones encarecieron la operatividad del Simapag ya que la extracción de un metro cúbico de agua de una presa tiene un costo de cinco pesos, mientras que de los mantos acuíferos subterráneos tiene un costo de 15 pesos.
“Traíamos un gasto promedio de 1.5 millones de pesos en energía eléctrica antes de la pandemia, y cuando comenzamos a operar con batería de pozos, aumentó a 1.2 millones de pesos al mes”.
En este sentido, informó que en las dos principales de la capital ya se ha retomado la extracción, debido a que incluso se vieron rebasadas en su capacidad máxima y el agua excedente se tenía que desfogar por las compuertas.