Desde el Faro

EL MUSEO DEL CONGRESO DE GUANAJUATO, UN MUSEO VIVO

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Historia, música y artes plásticas se integran

Como un espacio donde se investiga, colecciona, conserva e interpreta una parte de la historia, donde también se disfruta de la música y las artes plásticas, se encuentra el Museo del Congreso de Guanajuato, un sitio incluyente, abierto al público, donde, además, se fomenta la diversidad con la participación de las comunidades.

Aquí se pueden encontrar documentos, como los relacionados a la Diputación Provincial, que funcionó en la entidad desde 1822, para dar paso después al Primer Congreso Constituyente de Guanajuato. Esa Diputación Provincial, con los escasos recursos que tenía, aprobaba asuntos urgentes relacionados con desastres naturales, y la construcción de puentes, caminos y hospitales, entre otras obras públicas.

La historia, los relatos de cada región, contados por testigos de los acontecimientos, fotografías que muestran la vida cotidiana de pueblos y ciudades; pero sobre todo, leyes y reglamentos, pueden encontrarse en este sitio.

Y si alguien busca la cronología de las diversas administraciones estatales, aquí la encuentra; lo mismo que la integración de las legislaturas, desde el Siglo XIX hasta el siglo actual; lo mismo sucede con los ayuntamientos, todo puede localizarse aquí; pero no es un sitio solo para especialistas y estudiosos de la historia, es un lugar de encuentro de poetas, músicos, escritores, artistas plásticos, sabios que transmiten sus conocimientos a niños y jóvenes.

Memorable fue la participación de Yasuaki Yamashita, el sobreviviente del ataque nuclear en Nagasaki, Japón; aquella vez, en perfecto español, el hombre que ha recorrido varias partes del mundo para contar su experiencia, dijo: “a muchos años de distancia, miles de japoneses no han perdonado a los Estados Unidos por este terrible hecho, sin embargo, seguir con odio nada solucionará, en algún momento debe caber la capacidad de perdonar para estar en paz, y yo, estoy en paz”. Su mensaje fue ante niños, jóvenes y adultos; palabras que aún tienen vigencia.

Pero también escritoras locales como Rubria Morales, Flor Bosco y Marta Elena Romero han presentado sus libros y dialogado con diferentes tipos de público.

En cuanto a la plástica, muchos pintores y escultores han pasado por aquí. En la actualidad hay una exposición colectiva en la que participan: Alan Geberstein, con su obra fotográfica titulada “Retratos de Oriente”, el Museo Iconográfico, con la colección “Don Quijote Soy”; Oliver Esquivel y “Retratos del Silencio”, y Gerardo Uribe Aguayo, con varias de sus pinturas abstractas.

Sí, este es un sitio de encuentro de músicos, pintores, literatos, historiadores, sabios, niños, jóvenes, indígenas, campesinos; es un museo con vida propia.