Guanajuato, Gto. Luego de la capacitación que se dio a personal de los 17 municipios con Alerta de Violencia de Género, para que apliquen el Instrumento de Valoración de Riesgo de Violencia Feminicida (IVRVF) y emitan Órdenes de Protección, se han detectado 351 casos en lo que va del año.
El objetivo es implementar este instrumento, para que permita proteger la vida de mujeres que sufren violencia en el ámbito familiar, al medir el riesgo que enfrenta una mujer cuando denuncia este tipo de violencia.
El mayor número de violencia detectada es la moderada con 221 casos, en nivel alto hay 71 casos, en crítica 34 y en violencia feminicida 25.
La directora del Instituto para las Mujeres Guanajuatenses (IMUG), Itzel Balderas Hernández, dijo que la digitalización de estos procesos, tiene como beneficio facilitar a las Instancias su implementación y agilizar la emisión de Órdenes de Protección Administrativas.

Derivadas de estas valoraciones, el Instituto ha otorgado 57 Órdenes de Protección Administrativas a mujeres que estaban en riesgo.
En otros temas, Itzel Balderas, informó que también se trabaja en la erradicación del embarazo infantil y disminuir el embarazo en adolescentes, por lo que se sensibilizó a los Grupos Municipales de Prevención de Embarazo, sobre la conformación de planes de vida positivos en las infancias de Guanajuato.
Estas capacitaciones buscan proporcionar alternativas a los Municipios, para que desarrollen acciones y políticas públicas, que permitan a las infancias y adolescencias, proyectos de vida igualitarios y libres de violencias.
Itzel Balderas, afirmó que estas acciones de sensibilización resultan fundamentales para promover el desarrollo integral de las infancias y adolescencias.
La elaboración de planes de vida positivos busca que las adolescencias visibilicen las desigualdades entre mujeres y hombres, por ejemplo, en el hecho de que no es lo mismo ser papá o mamá a esa edad.
Además de romper con la creencia de que las mujeres solo pueden estudiar ciertas carreras, como enfermería por ser una actividad de cuidados, cuando muchas de ellas tienen habilidades en tecnología o conocimientos que históricamente se pensaban solo para hombres.