La postulación del sitio patrimonial fue promovida por la Dirección de Ecología del Municipio de Corregidora
- Es otorgada por la Universidad Politécnica de Santa Rosa Jáuregui a espacios que fomentan la conservación y el disfrute sustentable del medioambiente
- El reconocimiento será entregado este martes 14 de octubre, a las 10:30 horas, a las autoridades del INAH en la entidad
CDMX.- Este martes 14 de octubre, la Zona Arqueológica El Cerrito, perteneciente a la red del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y ubicada en el corazón del municipio de Corregidora, Querétaro, recibirá la certificación Sello de Biodiversidad Querétaro, promovida por la Universidad Politécnica de Santa Rosa Jáuregui (UPSRJ) para aquellos espacios que fomentan la conservación y el disfrute sustentable del medioambiente.

En comunicado de prensa se informó que el reconocimiento será entregado en una ceremonia en el sitio a las 10:30 de la mañana, por el presidente municipal de Corregidora, Josué David Trápala Guerrero, y el rector de la UPSRJ, Christian Reyes Méndez; lo recibirá la directora del Centro INAH Querétaro, Rosa Estela Reyes García, acompañada por la titular del Museo de Sitio El Cerrito, Claudia Dovalí Torres.
La postulación del sitio patrimonial fue promovida por la Dirección de Ecología del Municipio de Corregidora y, luego de una inspección que diagnosticó la superficie del sitio arqueológico, el porcentaje de especies nativas, la protección del área, la existencia de senderos, la señalética instalada, el programa de mantenimiento, las jornadas ambientales, los bebederos para fauna y las buenas prácticas, se decidió que debía de recibir el certificado.
Claudia Dovalí, responsable de dar seguimiento a estas iniciativas, narra que, desde 1995, cuando el arqueólogo Daniel Valencia Cruz (1959-2023) encabezó el Proyecto Arqueológico El Cerrito, cuyo objetivo esencial era la recuperación y protección del principal centro ceremonial prehispánico del valle de Querétaro, se vio la necesidad de profundizar en la investigación arqueológica e histórica del lugar, así como contrarrestar la fuerte presión del crecimiento urbano.
El proyecto arqueológico tomó un giro hacia una conservación integral y dentro de su plan maestro, en el rubro de mantenimiento arqueológico, se señalaron los principios del plan de conservación ambiental: procedimientos para el control de fuentes de humedad; la recuperación de la vegetación durante los procesos de excavación arqueológica para el trasplante de las especies endémicas y uso de la vegetación local en cercados y cubiertas.
Asimismo, establecer perímetros de amortiguamiento tipo ecológico en el entorno inmediato; diseño de senderos ecológicos y señalética de flora; manejo de flora nociva, corte de pasto y control de raíces. Dichas acciones resultaron en la conservación de flora ya extinta en el entorno urbano y dieron refugio a diversas especies de fauna, lo que convirtió a El Cerrito en un importante pulmón verde.
En 2023, especialistas de la Facultad de Ciencias Naturales de la Universidad Autónoma de Querétaro realizaron un diagnóstico de flora y fauna, a partir del cual resumieron el tipo de vegetación dominante: 21 familias con un total de 35 especies propias de los matorrales xerófilos (mezquites, cactáceas y agaves) y de bosques tropicales caducifolios (copal, ceiba, palo bobo).
También identificaron 17 especies de aves residentes y dos migratorias, de las 74 especies registradas en el área urbana de Querétaro; cuatro especies de arácnidos, escorpiones, alacranes; cinco tipos de insectos, siete tipos de escarabajos, cuatro especies de abejas y cinco de hormigas; así como diferentes tipos de reptiles y dentro de los mamíferos: tlacuache, zorrillo cola larga y zorrillo manchado, cacomixtle y zorra gris.
Se han sumado estrategias de educación ambiental a fin de concientizar a la población local y a los visitantes sobre la importancia de cuidar el entorno. Uno de los colaboradores más importante ha sido Banamex, a través de su Programa de Desarrollo de Arte y Cultura, que brindó recursos para adquirir las herramientas e insumos necesarios para el desarrollo de tales campañas divulgativas.
En los últimos dos años, se han atendido a más de 7,600 visitantes en recorridos naturalistas, talleres lúdicos, activaciones de verano y exposiciones temporales. El Cerrito ha logrado un importante crecimiento, proyectado por Valencia Cruz. Hoy cuenta con un museo, una galería perimetral, 1,404 metros lineales de senderos de visita y una destacada reserva natural.