Guanajuato, Gto. Carlos Daigoro Fonce Segura, subsecretario para la Inclusión de las Personas con Discapacidad de la Secretaría de Derechos Humanos, destacó que la accesibilidad es un derecho fundamental y la base para el ejercicio de otros derechos humanos, particularmente para las personas con discapacidad y las personas mayores.
Durante el evento, “Patrimonio inclusivo: hacia una cultura accesible para todas y todos”, la presidenta municipal, Samantha Smith, recibió de manos de la presidenta del Colegio de Arquitectos Guanajuatenses, Claudia Ivette Martínez Chávez, y de Carlos Daigoro Fonce Segura, subsecretario para la Inclusión de las Personas con Discapacidad de la Secretaría de Derechos Humanos del Estado de Guanajuato, el Modelo de contenidos sobre accesibilidad para la reglamentación municipal, que servirá como referencia para su incorporación en la normatividad municipal correspondiente.
Señaló que la arquitectura y las decisiones de diseño pueden convertirse en un factor que facilite o limite el ejercicio de los derechos.

Por su parte la presidenta del Colegio de Arquitectos Guanajuatenses, Claudia Ivette Martínez Chávez, hizo un llamado a la colaboración entre autoridades, profesionales y sociedad para atender los desafíos pendientes, particularmente en materia de accesibilidad para personas con discapacidad, subrayando la necesidad de contar con recursos suficientes para avanzar en la construcción de una ciudad que pueda ser disfrutada por todas y todos.
Además, la alcaldesa, Samantha Smith, afirmó que la accesibilidad y la inclusión deben ser principios rectores en la planeación urbana y en la conservación del patrimonio. Dijo que una ciudad no puede considerarse verdaderamente segura, viva y sostenible si excluye a personas que enfrentan barreras para disfrutarla y habitarla plenamente.
Samantha Smith subrayó que el patrimonio no puede entenderse solo como objeto de conservación, sino como un espacio vivo que cobra sentido a través de las personas que lo habitan. En ese sentido, reconoció el papel del Colegio de Arquitectos Guanajuatenses a lo largo de cinco décadas de historia, así como su contribución al desarrollo urbano, la protección del legado histórico y la evolución responsable de la ciudad.
