EXPEDIENTE ECOLÓGICO
Jacinto Jaramillo Rocha
15 de octubre de 2011
Guanajuato y sus guanajuatenses, siempre tan controvertidos e inteligentes. Hoy quiero hablarles sobre la posición tan radical y llena de encono que algunos “guanajuatenses” preocupados por su rancia ciudad, bueno digamos de forma clara preocupados por no ser parte de este ambicioso proyecto de la Bufa, el Hormiguero o los Picachos, el cómo llame usted a este lugar es lo de menos.
No hay duda que es una zona muy representativa y que reúne un sinnúmero de atractivos en la ciudad, desde la tangible y lo intangible como la cueva de san Ignacio de Loyola, la leyenda de la princesa y el pastor y por supuesto la Fiesta de la Cueva que festeja a san Ignacio y por lo que se dice incluso tiene un de origen prehispánico, cosa que no pongo en duda.
Reflexionemos y pongamos las cosas claras: se argumenta que las personas que se oponen a este proyecto son solo gente común y con el único interés de cuidar el entorno ecológico. Yo diría, sin ánimo de ofender a nadie, que están siendo utilizados. Como siempre, por personas interesadas en sus propios fines y que cuando no son invitados, optan por destruir todo proyecto que no los involucre.
Si nos referimos a daños que esta obra pudiera ocasionar en el entorno, permítanme decirles que estos serían mínimos y creo que habría mayores beneficios. Primero la zona de festejo no sería tocada y habría paso de servidumbre para continuar con el festejo tan añejo que reúne a miles de guanajuatenses, segundo la flora del lugar es tan común en nuestra región que no se daría pérdida de especies, en cuanto al impacto en la temperatura local, esto se remedia con las áreas verdes que se proyectan en tal desarrollo. Se debe considerar que un daño irremediable no existe y además se tendrían beneficios como es el tener una zona bien planeada y desarrollada en un entorno sustentable.
En cuanto al tema del agua esto no sería problema ya que existen siempre proyecciones de crecimiento hacia cualquiera de los rumbos y creo que la parte más importante de esta posible gran obra es la mano de obra que se requiere para llevarla a buen término y el empleo que generaría por un tiempo indeterminado.
Ese asunto se debe meditar y si lo que se quiere es hacer caso solo a una minoría, entonces veamos y volteemos hacia el cercano Silao donde tierras de excelente calidad y dedicadas al cultivo de diferentes semillas para nuestro consumo fueron utilizadas para la industria con al argumento de generar gran cantidad de empleos. ¿Pueden ver ustedes la diferencia? Espero que sí.
* *
Nativo de Guanajuato, se inició en la meteorología a la edad de 17 años con Luis Miguel Campos Castillo. Trabajó con el Ing. Miguel Izaguirre Mendoza responsable de la meteorologia, sismologia y astronomía de la UG. Fue jefe del observatorio ante la ahora desaparecida SARH. Su formación la adquirió con el Servicio Meteorológico Nacional y dentro del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua con sede en el estado de Morelos. Ingresó a la CONAGUA en 1991 y hasta el 2007 como instructor y jefe del Observatorio Meteorológico de Guanajuato. Forma parte del personal de la UG desde 1982.
