Niños disfrutan musical de “Pedro y el Lobo” en el Juárez

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Guanajuato, Gto. 20 de octubre de 2014.-¿Están listos para que les cuente un cuento?… fueron las palabras mágicas para que los niños de diversas escuelas de preescolar de la capital guardaran silencio para escuchar con atención, la historia de Pedro y el Lobo, presentado por la Orquesta Sinfónica de la Universidad de Nuevo León invitado de honor a esta edición 42, del Festival Internacional Cervantino.

La Orquesta Sinfónica de Nuevo León ofreció el musical (Foto: Especial)
La Orquesta Sinfónica de Nuevo León ofreció el musical (Foto: Especial)

En el teatro Juárez la agrupación sinfónica universitaria reprodujo la historia que concibió Natalya Sats, en 1936, cuando dirigía el Teatro Central Infantil de la Unión Soviética y le encargó al destacado compositor  Serguéi Prokófiev,  la famosa sinfonía que se ha vuelto una clásica entre el público.

En aquellos años Sats hizo la sugerencia de que un joven asumiera el papel del Lobo y el resto de los animales que aparecen en la historia fueran representados por un instrumento. Hoy todos los animales son representados en su imagen sonora y hay un narrador que va llevando la historia.

Así Pedro fue representado por las cuerdas, el pajarito  por la flauta, el pato que camina lento y bamboleándose fue representado por el oboe; el gato, sigiloso y travieso es el clarinete; el abuelo sabio y regañón fue interpretado por el fagot.

A los cornos les toco interpretar al villano que en este caso es el lobo, mientras que  los cazadores por su puntería errática fueron dibujados por las percusiones.

Una vez que se estableció qué instrumentos o mejor dicho qué sonidos representarían a los personajes de la historia comenzó el concierto y los pequeños desataron la imaginación para seguir atentos la narración hablada y sonora.

El lleno total y el concierto dejó en claro que en la fiesta del espíritu, hay oferta cultural para todos porque a pesar de que la historia de Pedro y el Lobo es breve, se complementó extraordinariamente  con las piezas del mexicano más reconocido por el público infantil de muchas generaciones: Francisco Gabilondo Soler, Cri Cri.