OSUG interpretará piezas de Brahms y Martinů bajo la batuta de Christopher Zimmerman

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  •  La cita para el concierto es este viernes 25 de noviembre a las 20:30 horas, en el Teatro Principal.

Guanajuato, Gto. 25 noviembre de 2016.- Este viernes, la Orquesta Sinfónica de la Universidad de Guanajuato (UG) deleitará al público con la Sinfonía no. 3 de Johannes Brahms y dos obras del compositor checo Bohuslav Martinů: Rapsodia y Concierto para oboe y orquesta de cámara.

Héctor Eduardo Fernández Purata, miembro de la OSUG (Foto: UG)
Héctor Eduardo Fernández Purata, miembro de la OSUG (Foto: UG)

La OSUG será dirigida por Christopher Zimmerman, Director Musical de la Orquesta Sinfónica de Fairfax, cuya trayectoria ha sido reconocida por la crítica especializada y con premios como el de la Asociación Nacional de Ópera y el American Conducting Prize, que destaca la labor del mejor director de orquestas, coros y óperas de los Estados Unidos.

En el oboe estará Héctor Eduardo Fernández Purata, miembro de la OSUG y promotor activo de la música de cámara, quien ha participado como solista en la Camerata de San Luis, la Camerata del Centro Municipal de las Artes de Mazatlán y con la Orquesta de Cámara de la Universidad Michoacana. Como oboísta invitado ha participado con orquestas como la Sinfónica Nacional de México, Filarmónica de la Universidad Autónoma de México, Sinfónica de Minería, Sinfónica de San Luis Potosí, Sinfónica de Aguascalientes, Filarmónica de Jalisco, entre otras.

En el concierto de este viernes, la OSUG estrenará en México Rapsodia, de Bohuslav Martinů, que constituye la primera tentativa del autor por escribir una sinfonía dedicada al décimo aniversario de la independencia de la entonces Chocoslovaquia.

A la Rapsodia, también se la denominó Sinfonía Militar, probablemente por el uso de los metales en la misma, cuya potente sonoridad se presenta desde el comienzo con ricas texturas tímbricas.

El concierto para oboe y pequeña orquesta ejemplifica muchas de las características del estilo de Martinů, como son el uso de ondulantes líneas melódicas barridas por ritmos-transversales, o el empleo inusual pero efectivo del piano como instrumento de orquesta.

La obra, estructurada en tres movimientos, muestra una escritura brillante, sobretodo en la parte solista, la cual deja la posibilidad de ajustes por parte del dedicatario.

El programa 12 de la segunda temporada de conciertos de la OSUG incluye la Sinfonía no. 3 en fa mayor de Brahms, que muestra una magnífica solidez estructural y una profunda expresión del complejo mundo emocional del autor.

La Sinfonía no. 3 se erige como un magnífico edificio sinfónico que representa un giro hacia el estilo de la última época de Brahms. Su romanticismo conservador y abstracto, sufre a lo largo de la obra un cambio de paradigma expresivo desde la monumentalidad y el dramatismo claramente beethovenianos del primer movimiento a la atención al detalle del cuarto, más próximo a la música de cámara.