Guanajuato, Gto 18 de noviembre de 2016. La coordinadora de los diputados del Partido Verde Ecologista de México, Beatriz Manrique Guevara, lamentó el poco respaldo que recibió José Raúl Montero de Alba, para encabezar la Procuraduría de los Derechos Humanos de Guanajuato.
Al término de la sesión del pleno de este jueves y aunque ya era un resultado muy cantado en los pasillos del Congreso, no se esperaba que fuera tan “apenitas”, la aprobación de Montero de Alba.
“Es muy triste y muy lamentable que hoy tengamos la designación de un procurador con tan poco respaldo en una votación que fue escasísima; 21 votos estamos hablando de los de Acción Nacional y dos convencidos más”, espetó la coordinadora.
De hecho la coordinadora manifestó que para ellos fue imposible escoger al procurador de los Derechos Humanos de Guanajuato, de la terna que envió el ejecutivo estatal, aunque subrayó que con esa apreciación no se quiere vilipendiar o hacer escarnio de ninguno de los participantes.
Señaló que por un lado se encontraron a personas que les expusieron asuntos que son inadmisibles en la trayectoria de un aspirante procurador en las mesas de trabajo, también había “un medio terrible a salirse del status quo de otros; gente que dice que su sueldo está obligado a la calidad moral de la Procuraduría, no es elegible”, enfatizó.
Las personas que reconocen que no tienen claro que es lo que van a hacer en la Procuraduría tampoco son elegibles; personas que no saben que es una alerta de género, menos son elegibles, añadió.
“Legalmente cumplieron con los requisitos y el Poder Legislativo hizo el procedimiento, pero es una ofensa para el poder Legislativo que nos hayan mandado una terna en las condiciones en las que nos la mandó” el gobierno estatal, reprochó.
También criticó “todos los adornos” que ha hecho el gobernador sobre la sucesión, “con cabildeos cada vez más burdos y es una pena de verdad”, enfatizó la legisladora.
Dijo que en esta sesión no se estaba eligiendo únicamente a un servidor público, sino se estaba decidiendo la segunda etapa de la procuraduría de los Derechos Humanos de Guanajuato, que obliga a más fortaleza.
