Guanajuato, Gto. 02 de julio de 2017.- Luego de los sismos ocurridos el día 30 de junio en las cercanías del municipio de Romita y de las comunidades de Barretos y la Sardina, el Ing. Juan Esteban García Dobarganes Bueno, Director del Departamento de Ingeniería en Minas, Metalurgia y Geología de la Universidad de Guanajuato (UG), consideró que la poca cantidad de sismos registrados en el estado “aún no permite pensar en que pueda acontecer un evento mayor, o inferir el movimiento de alguna estructura en particular, se requiere seguir monitoreando esta zona por más eventos sísmicos que permitan establecer sus probables causas y correlación y en su caso se podrá establecer el riesgo y tipo del mismo”.
El Dr. García Dobarganes sugirió que “los aparentes efectos de los sismos de baja magnitud como los acontecidos el 30 de junio, sobre edificaciones y bardas de la comunidad de Barretos, se pueden deber a lo somero del foco del evento sísmico (2 km), a la mala construcción de bardas y casas, o al tipo de suelo, espesor del mismo, sedimento o roca sobre el que se construye o a una combinación de estos factores”.
“Lo que sí es un hecho es lo que todos podemos ver, y es que se tiene un incremento de la sismicidad en esta área de Guanajuato en este año, y por lo tanto debe monitorearse más cercanamente cualquier evento y mantener informado al público”, añadió.
Expuso que los sismos que tienen lugar a poca profundidad ocurren en la zona frágil de la corteza, e indican generalmente movimiento en fallas o fracturas de la roca que puede ser ocasionado por esfuerzos tectónicos o por efectos hidrogeológicos.
Respecto a los sismos registrados el viernes 30, el Ing. García Dobarganes Bueno detalló que el Servicio Sismológico Nacional (SSN) registró los datos siguientes:
M 3.8
13 km al noroeste de Romita, Gto.
2017-06-30, 02:44:53, Lat: 20.93°, Long: -101.62°, Prof: 2 km
M 3.9
17 km al oeste de Romita, Gto.
2017-06-30, 07:18:52, Lat: 20.86°, Long: -101.68°, Prof: 2 km
Explicó que “los sismos que ocurren en el estado y sobre todo en la zona de Romita-Guanajuato-León, podemos distinguir dos áreas, la noreste que se encuentra en la Sierra de Guanajuato y la suroeste que se encuentra en el Bajío, con una característica común, que ambas están en la fosa tectónica conocida como Graben de Villa de Reyes o en su traza o aparente continuación respectivamente”.
Desde 1999 a la fecha, han ocurrido diez sismos con foco desde la Sierra de Pénjamo hasta la zona de Arperos, ya en la Sierra de Guanajuato, todos de Magnitud 3.6 a 4.0, es decir, de baja magnitud. “De estos sismos, tres son muy profundos, con foco entre 58 y 149 km de profundidad (puntos en color rojo obscuro), que probablemente están relacionados a la subducción de la placa de Cocos, de la placa Rivera o a algún otro fragmento de placa, y ocurrieron entre 1999 y 2006, de acuerdo a los datos del SSN”.
Los otros siete sismos llaman más la atención, asentó, “no sólo por haber ocurrido a poca profundidad, sino por tener su epicentro en las cercanías de ciudades grandes y de importancia en el Estado de Guanajuato, como lo son León, Guanajuato y Silao, así como por ocurrir en un área en donde no es común que tenga lugar actividad sísmica”.
El académico de la UG, recordó que, de estos siete sismos, los dos que se ubican más al noreste (puntos en color naranja), ocurrieron a una profundidad de 15 km y tuvieron lugar en el año 2012.
Finalmente, detalló que en 2014 ocurrió un sismo a una profundidad de 11 km (punto en color amarillo), mientras que cuatro sismos ocurrieron en el mes de junio de 2017 (representados con puntos verdes); los del 13 y 14 de junio (puntos color verde obscuro) tuvieron lugar a 5 km de profundidad; mientras que los dos sismos del día 30 de junio, (representados por puntos color verde brillante), ocurrieron a sólo 2 km de profundidad.
