OSUG recibe la presea «Mtro. Eugenio Trueba Olivares» por su labor de difusión musical en el estado
CULTURA/Guanajuato, Gto. 14 de octubre de 2019.- Con la presentación de su primer programa dentro de la 47 edición del Festival Internacional Cervantino con un concierto en el Teatro Juárez en el que realizó un homenaje al compositor francés Hector Berlioz a 150 años de su muerte, la Orquesta Sinfónica de la Universidad de Guanajuato (OSUG) recibió la presea Orgullo Guanajuato «Mtro. Eugenio Trueba Olivares» por parte del Instituto Estatal de la Cultura (IEC).
De acuerdo al comunicado de prensa del IEC, este reconocimiento es a su labor de más de seis décadas de invaluable aportación a la cultura musical de Guanajuato y su intensa participación en el Festival Internacional Cervantino (FIC).
La Directora General del IEC, Lic. Adriana Camarena de Obeso entregó la presea al concertino de la orquesta, Mtro. Dmitri Kisselev en representación de los músicos que la integran.
Al respecto, el Rector General de la Universidad de Guanajuato, Dr. Luis Felipe Guerrero Agripino, comentó que “nuestra orquesta pasa por un buen momento con su director titular, Roberto Beltrán Zavala” y felicitó a toda la agrupación por ser parte del patrimonio cultural, no solo de la universidad sino de todo el estado.
Los músicos de la orquesta interpretaron la “Sinfonía fantástica” de Berlioz estrenada en 1830, una sinfonía descrita como muy novedosa para su época y que en la actualidad sigue sorprendiendo a sus escuchas. Cabe hacer mención que es la primera de cuatro sinfonías que compuso Berlioz y en ésta plasmó el amor y el desamor que vivió después de conocer a la actriz Harriet Smithson.
En esta ocasión, la OSUG contó con un invitado de primera calidad, al violinista Carmine Lauri quien interpretó el “Concierto para violín” de Glazunov. Su maestría interpretativa hizo que la complejidad del concierto pasara desapercibida. Lauri es una de las grandes figuras del violín en Europa y es concertino de la Orquesta Sinfónica de Londres.
Otra de las obras que interpretaron fue el “Bolero” de Maurice Ravel, una pieza que el compositor escribió en 1928 para la bailarina Ida Rubinstein que se caracteriza por la invariabilidad de ritmo y tempo, así como la repetición obsesiva de la melodía, formada por dos temas. Lo que articula de manera magistral la obra es el crescendo que se da de manera continua con cada nueva entrada del tema, que en la versión orquestal vienen dada por una instrumentación variada.
Es preciso mencionar que la siguiente presentación de la OSUG en el FIC será el próximo sábado 19 de octubre a las 20:00 horas en la explanada de la Alhóndiga de Granaditas en la que acompañarán a Fito Páez, uno de los exponentes más importantes del rock argentino de los últimos 30 años.