Musicat: escapar de la pandemia haciendo música*

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Trabajo virtual

El Seminario de Música en la Nueva España y el México Independiente grabó una pieza del siglo XIX

Hugo Maguey 

¿Por qué no lo grabamos? Esas fueron las palabras que un miembro del grupo Musicat, del Seminario de Música en la Nueva España y el México Independiente, expresó en una junta y que dio como resultado un trabajo que tomó más de siete meses en ser terminado y que se grabó de manera virtual.

El seminario es una comunidad académica internacional integrada desde 2002 por especialistas en musicología, sociología, historia, historia del arte, historia cultural, antropología cultural, archivística, bibliotecología, restauración y organología y tiene su sede en el Instituto de Investigaciones Estéticas (IIE).

 ©Gaceta UNAM

Desde hace 20 años han hecho grandes descubrimientos en la librería de cantorales y el archivo de música de la Catedral de México. Sin embargo, la pandemia hizo que ambos recintos cerraran el 25 de marzo de 2020, y poco después también lo hizo el Instituto de Investigaciones Estéticas. Los integrantes de Musicat, aunque estaban trabajando vía remota porque algunos de sus integrantes están fuera de la ciudad y algunos otros, del país, quedaron aislados sin poder realizar las actividades que acostumbraban en estos recintos.

En esa nueva normalidad se reencontraron con las fotos de partituras del siglo XIX de José Ignacio Triujeque escrita alrededor de 1843, cuando la capilla de música de la catedral ya estaba cerrada por falta de recursos debido a las luchas de independencia, invasiones y despojos que sufrió México en esas épocas.

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“Nos dimos cuenta de la importancia de esta obra por las similitudes con las circunstancias actuales, entre el pasado y el presente. En ocasiones importantes para la Iglesia, Triujeque llamaba a sus compañeros hacía arreglos a partituras ya existentes o a música que él compraba para que la catedral tuviera cánticos… la música era un invitatorio, que es el género de obra con el que empieza un oficio de difuntos, revisamos las fotos de un libro de coro y vimos que podíamos dar vida a esa música en la manera como se hacía en el siglo XIX, intercalando el canto llano con la música de autor. En ese momento escapamos de la pandemia haciendo música”, explica Lucero Enríquez Rubio, investigadora del IIE y coordinadora de dicho seminario.

Para grabar la pieza, la también compositora y clavecinista se encargó de hacer un programa para convocar a los músicos, de mandarles los manuscritos de transcripción de la obra para que los grabaran. Un detalle importante es que sólo trabajaron los integrantes del seminario, no se invitó a nadie externo. “Fue complicado porque muchos no tenían un buen micrófono para grabar, así que lo hicieron con su teléfono celular… se les enviaron los tempi, la afinación, se les dijo cómo tenía que estar la cámara, hicimos todo un cronograma, se hizo una premezcla y se dio como fecha límite el 15 de agosto para mandar las pistas, porque había que hacer el video”.

El preestreno fue en el Colegio de Investigadores del IIE, y el estreno se hizo, a petición de la embajada de México en Indonesia, el 27 de septiembre, día del Bicentenario de la Independencia de México.

“Somos un seminario completo que labora muy duro, desde literalmente sacudir los expedientes hasta difundirlos y divulgarlos… un equipo que se reúne en grupos de trabajo dos o tres veces por semana, y cada último viernes de mes, que tiene un comité editorial y vivimos en continuas juntas, con un rango de edades de 20 hasta 80 años con muchas disciplinas involucradas”, comenta la coordinadora.

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Supervivencia espiritual

Sobre lo que significó este proyecto, la especialista, señala: “Es parte de la supervivencia espiritual de un músico: si no tocas, te mueres. La pandemia se resintió mucho en algunos gremios, pero más en los performanceros… el zoom es ingrato, aun así, todavía se puede hacer teatro, pero para los músicos, los conjuntos, los ensayos, es muy difícil. Por ello, haber grabado esta obra, con músicos de Durango, de Argentina, Brasil, con un maestro de Morelia, todos miembros del seminario, que trabajaron como becarios, servidores sociales o profesionales fue muy satisfactorio”.

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*Tomada de Gaceta UNAM. Publicada con fines no lucrativos. Si usted está interesado en estos temas, visite el sitio: https://www.gaceta.unam.mx/musicat-escapar-de-la-pandemia-haciendo-musica/