Los astronautas Rodolfo Neri Vela y José Hernández Moreno; y el Premio Nobel de Química, Mario Molina, han sido su inspiración; desde que platicó con ellos, cada uno la cautivó por sus historias de vida; a partir de entonces, se ha dedicado a investigar el trabajo de los científicos mexicanos y las motivaciones que los impulsan; su principal herramienta ha sido la radio, la que considera, es el mejor medio para difundir “el fabuloso mundo de la ciencia”.
Frente al micrófono de la radio universitaria ha logrado transmitir, con pasión, su inquietud de llevar al “gran público” los beneficios del conocimiento, y ha tenido éxito porque se pone en los oídos de quienes la escuchan, es decir, pregunta a sus entrevistados lo que siente, le puede interesar a los radioescuchas. De esta forma, en una de las emisiones de “El Dado”, programa que ella produce, Neri Vela le confesó que al ver a la Tierra desde el espacio exterior reflexionó sobre el verdadero sentido de la vida.
“Mientras orbitábamos alrededor de nuestro planeta, me acercaba a las ventanillas para observarlo y apreciar su hermosura y armonía, entonces, supe que yo como ser humano nada soy ante la grandiosidad del universo”, dijo el astronauta a la comunicadora.
Como se recordará, el primer astronauta mexicano participó en la misión del Transbordador Espacial Atlantis, lanzado el 26 de noviembre de 1985; en el programa de radio, Neri Vela recordó que en el despegue, al principio nada sintió, pero después, “fue pavoroso, sentí que me destrozaba en pedacitos”; la nave alcanzaba en esos momentos una velocidad de 28 mil kilómetros por hora. Luego, durante 7 días, los astronautas le dieron 5 vueltas a la Tierra, “durante ese tiempo estuvimos flotando en la ingravidez, ¡fue algo fabuloso!”.
Otro detalle revelado por Neri Vela es que la NASA pidió a los astronautas eligieran algo de sus respectivos países para comer, y el mexicano solicitó tortillas, y como estas, no se desmoronan y por consecuencia, no perjudican a los sistemas electrónicos, a partir de entonces, la Agencia Nacional de Aeronáutica y del Espacio decidió sustituir el pan por el alimento mexicano.
JOSE HERNÁNDEZ MORENO Y LA PERSEVERANCIA
En su charla con Dalia Tovar, el astronauta, hijo de campesinos mexicanos, pero nacido en Estados Unidos, reveló que a los 6 años de edad, época en que trabajaba con sus padres en los campos agrícolas de California, tuvo el deseo de ser como Neil Amstrong, el primer ser humano que pisó la Luna. “Fue una ilusión permanente durante gran parte de mi vida, por ella luché hasta que el 28 de agosto del 2009 fui parte de la tripulación del Discovery”.
Pero el camino para llegar a la meta no fue fácil, Hernández Moreno fue rechazado ¡10 veces ¡en su intento por ingresar a la NASA hasta que fue aceptado en mayo del 2004. “A los 30 años hice el primer examen, me rechazaron, fue un golpe muy duro, sentí que mis esfuerzos habían sido inútiles, volví a presentarlo 10 ocasiones más, y me aceptaron, por eso, les digo a los jóvenes que no deben darse por vencidos jamás”.
“CIENCIA PARA LOS NIÑOS”
En 1995, Mario Molina recibió el Premio Nobel de Química por su trabajo, mediante el cual se comprueba que los gases de cloro, bromo y dióxido de carbono son una amenaza para la capa de ozono que cubre la tierra e impide que los rayos ultravioleta lleguen a los seres vivos; y en el programa de radio ratificó que la emisión de esos gases contribuye al cambio climático, como evidencias destacó que las ondas de calor registradas cada 10 años son más fuertes; “esto ya no es una especulación, pero por fortuna, el problema no es irreversible”.
El científico le dijo a Dalia Tovar que para frenar el problema se deben utilizar la energía solar, la eólica y la nuclear; también insistió en la educación ecológica, y acercar la ciencia a los niños,” porque ellos, aunque se ha dicho muchas veces, son la generación del cambio “.
Pero, Dalia no tan solo ha entrevistado a científicos, también a otras personas que son un ejemplo a seguir, como el afamado tenor mexicano Javier Camarena, y Mónica Vergara, la entrenadora de la Selección Mexicana de Futbol Femenil; por supuesto, también a investigadores y académicos de la Universidad de Guanajuato. Todo empezó en septiembre del 2017, a partir de entonces, cada semana, en el programa “El Dado”, los radioescuchas son lanzados a la aventura del conocimiento con la pasión que caracteriza a la joven, egresada de la UNAM, y que ha encontrado en Radio UG un verdadero sentido a su vida.