Por: Selene Escalante
Guanajuato, Gto. China es el mayor productor de la flor de cempasúchil, a pesar de ser una planta nativa mexicana.
El nombre de cempasúchil proviene de la palabra náhuatl Cempohualxochitl que significa “veinte flores”.
Esta flor regional, se utiliza como ofrenda en el día de muertos, una de las tradiciones más importantes en México.
Sus orígenes provenientes de diversas culturas prehispánicas dictaban que se trazara un camino de pétalos en el altar, ya que su característico color naranja se relacionaba con los rayos del sol y su olor intenso funcionaria como guía para que las almas de los difuntos regresaran a casa.
La mayor producción radica en la zona céntrica de la República mexicana, siendo Guanajuato, Estado de México, Hidalgo y Michoacán, las entidades con mayor cosecha anualmente.
A pesar de ello, la distribución de la flor regional ha tenido complicaciones en estos años debido a la fuerte competencia que tiene la flor de cempasúchil china, así lo comentaron diversos comerciantes.
“Si nos ha afectado porque mucha gente prefiere llevar la plantita a llevar un ramo”, afirmó María Tamayo originaria de Guanajuato, quien durante 30 años trabajó como florista.
La característica de la flor china es el tamaño pues es más pequeña en comparación a la territorial.
La demanda de esta flor es, en consecuencia, la durabilidad de la misma, ya que al estar en macetas evita que se marchite con mayor facilidad, además de su fácil traslado.
No obstante, otros factores han impactado las ventas de esta flor, después de casi dos años de contingencia sanitaria por Covid los pobladores se han visto en la necesidad de priorizar gastos necesarios para el hogar.
El costo de los manojos se han visto al alza después del año 2020, pues diversos agricultores detuvieron la cosecha de la planta a raíz de la poca demanda de los consumidores.
El año pasado se retomaron los cultivos, aunque en menor cantidad, por el temor de las perdidas monetarias que podrían sufrir los comerciantes.
Actualmente, con la baja de restricciones sanitarias se puede encontrar a diversos vendedores ambulantes en las calles ofreciendo la flor, el precio de los manojos varia entre 20 a 30 pesos.
El cultivo del cempasúchil requiere un proceso especifico, ya que primero se lleva a cabo una técnica en donde se realiza la germinación de las semillas, mejor conocido como almácigo.
Posteriormente se vuelven a replantar donde los agricultores terminan de darle sus cuidados como riegos, abonos, etc.
Esta flor además de ser una ofrenda dentro de la tradición mexicana, tiene propiedades medicinales, su uso es principalmente para padecimientos digestivos, fiebre e inclusive enfermedades respiratorias.
Pese a las circunstancias que los mexicanos han enfrentado, no se han dejado de lado las raíces y tradiciones que nos han heredado nuestras culturas prehispánicas.
“Yo siento que es igual que otros años, yo siento que a pesar de que ya estamos en una situación complicada, la gente no pierde tradición, no pierde sus costumbres” comentó Rosalía, floricultora desde hace 5 años.
Se espera que este 2022, aumente el comercio para los floristas y floricultores del cempasúchil, después de todo es indispensable para el camino que guiara a nuestros seres queridos de vuelta a nosotros.