Parteaguas para la ciencia el sismo en Japón

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UNAM, 23 de marzo de 2011.- El temblor de nueve grados Richter registrado en Japón será un parteaguas en el conocimiento, en los campos de la sismología y la ingeniería. Esa nación cuenta con amplias redes de instrumentos de medición, que facilitarán el estudio, coincidieron investigadores universitarios.

En el último siglo han ocurrido 16 movimientos superiores a los 8.5 grados Richter y nueve rebasan los nueve grados, informó Shri Krishna Singh, profesor emérito de esta casa de estudios.

Estos grandes terremotos han roto el 25 por ciento de la zona de subducción terrestre (punto en donde se hunden las placas tectónicas), que mide 40 mil kilómetros, precisó el experto mundial en ingeniería sísmica.

En la mesa redonda Temblor y tsunami. Japón 11-03-11, explicó que los modelos utilizados permiten conocer diversos aspectos, como fuente y propagación; sin embargo, los científicos fallan en la estimación de la magnitud máxima.

“Se trata del problema más importante; tenemos que pensar en maneras serias de calcular este parámetro a nivel estadístico y probabilístico”, advirtió Krishna Singh, premio Nacional de Ciencias y Artes.

Al dar la bienvenida, el director del Instituto de Ingeniería (II) de la UNAM, Adalberto Noyola, se congratuló por la oportunidad de interactuar con expertos para comprender las repercusiones del sismo en Japón.

Francisco José Sánchez-Sesma, integrante de la misma entidad, explicó que los registros científicos demuestran que la tasa histórica muestra un comportamiento estable.

Por ejemplo, en 1976 hubo catastróficos, como el de la ciudad Tangshan, China, donde murieron 250 mil personas; en perspectiva, ese año tuvo poca sismicidad, aunque debido a ese evento, se especuló respecto al aumento notable de actividad, refirió el ex director de Investigación del Instituto Mexicano del Petróleo y del II.

Los centros de investigación sísmica japoneses contaban con modelos para estimar las consecuencias por esos fenómenos en distintos escenarios; sin embargo, no podían determinar el epicentro, ni la magnitud, afirmó el también integrante de la Real Academia de Ingeniería de España.

Sin duda, el país con la tercera economía del planeta destinará más recursos a la educación e infraestructura para reducir las consecuencias, abundó el experto, que ha contribuido al desarrollo de métodos para cálculos de ondas en sismología e ingeniería sísmica.

Tokai
Japón se sitúa sobre la placa Filipina, que subduce (proceso de hundimiento) bajo la Euroasiática. Este movimiento explica que sea una de las zonas más sísmicas del mundo.
Los investigadores de la nación asiática estaban atentos de la actividad en la región de Kanto, ubicada al este del país, en espera de un gran movimiento, refirió Arturo Iglesias Mendoza, jefe del Departamento de Sismología del Instituto de Geofísica (IGf).

Con el análisis de los grandes temblores ocurridos en el pasado, lograron determinar que cada 100 ó 150 años sucede una gran sacudida, el fenómeno denominado Tokai.

Está previsto que se produciría a lo largo de las depresiones de Suruga y Nankai, en la costa Pacífico de la isla de Honshu, epicentro de los terremotos en Tonankai, de 1944 y Nankaido, de 1946, superiores a ocho grados en la escala de Richter, detalló.

Los científicos pueden realizar mapas de las zonas de fallas, y a partir de éstos, pronosticar que en cierto número de años existe la probabilidad de que uno de cierta magnitud se produzca en un lugar determinado.
En el año 869, un sismo afectó la costa de Sendai y produjo el tsunami Jogan, que impulsó el agua hasta cuatro kilómetros tierra adentro. Al respecto, Iglesias Mendoza aseveró que el ocurrido el pasado 11 de marzo podría ser una repetición del de la época medieval.

Al respecto, Víctor Manuel Cruz Atienza, investigador del Instituto de Geofísica, informó que el registrado cerca de la trinchera (intersección de las placas tectónicas), provocó el levantamiento del fondo oceánico, lo que derivó en una gran ola. Entre 45 y 50 minutos después, el tsunami llegó a las costas de Sendai.