Carlos Olvera
Guanajuato, Gto. 15 de mayo de 2012.- Para manifestar su repudio “a los palomeados” en la lista de diputados plurinominales, alrededor de las 13:30 horas más de 200 integrantes de la CNC llegaron a las oficinas del PRI estatal encabezados por su líder estatal, Rigoberto Paredes Villagómez.
Bajo el fragor de la consigna “¡Ni un voto a Juani!, ¡Ni un voto a Juani!”, que ellos mismos corearon, los campesinos ingresaron a las instalaciones del Comité Directivo Estatal, ubicadas en Paseo de la Presa en la capital, mientras reclamaban a través de un alta voz la imposición de la lista de candidatos a diputados plurinominales y la exclusión de candidatos campesinos.
Instalados en el denominado Patio de los Sectores, varios jóvenes se quitaron las pulseras del candidato a la gubernatura por el PRI-PVEM, Juan Ignacio Torres Landa, y las quemaron, y después danzaron encima de una manta promocional de la campaña, porque según dijeron el candidato también pisoteó a los campesinos priístas.
Por su parte, Rigoberto Paredes, líder estatal del sector campesino tricolor, con la cara endurecida hablaba por teléfono celular y manifestaba su enojo, pues además encontraron vacío el Comité Directivo Estatal, sin nadie que los atendiera.
Paredes Villagómez se quejó señalando:“Empezamos bien con Juan Ignacio, hubo equilibrio en las diputaciones federales y en los ayuntamientos, pero se rompió porque (Javier) Contreras, porque Yulma (Rocha) y Santibáñez, traían las planillas a regidores y ellos hicieron lo que quisieron, no respetaron las sugerencias de la CNC”.
Situación que se repitió ahora, comentó, en la lista de los candidatos a diputados plurinominales porque tampoco los tomaron en cuenta, añadió. “¿Dónde están escondidos?, no lo sé”, dijo.
Al advertir que “con la dirigencia estatal está roto el diálogo”, el líder cenecista pidió que venga a negociar el Comité Ejecutivo Nacional. Dijo que ellos tienen alrededor de 30 integrantes del Consejo Político Estatal, que no fueron escuchados y que por eso permanecerán en posesión del edificio priísta, de manera indefinida, haciendo relevos, hasta que haya negociación.
