Literaria

La misteriosa historia de los Reyes Magos del Oriente

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Mosaico de los Reyes Magios en Rávena (Foto: Especial)

Usualmente en días cercanos a este, los niños de México y Latinoamérica esperan en sus hogares la visita de los tres Reyes Magos de Oriente, quienes llevan juguetes y demás regalos hermosos a los niños que han tenido un buen comportamiento durante todo el año.

El origen de esta emocionante tradición infantil se sitúa en los escritos bíblicos, mismos que narran que reyes de otras culturas que yacían en Oriente se enteraron del nacimiento y destino de Jesús, por lo que emprendieron un viaje largo hasta Jerusalén para rendirle tributos al nuevo rey de reyes  por medio de tres regalos que simbolizaban el destino de Jesús: oro, que simbolizaba la naturaleza real del pequeño niño; incienso, el cual significaba el carácter religioso que tendría como profeta, y la mirra, la cual era un augurio de su futura muerte.

Se tiene la creencia de que son tres reyes magos por la cantidad de presentes que se le ofrecieron al niño Jesús, sin embargo existen otras teorías de que podrían ser más reyes los que se presentaron; el asunto de llamarlos magos viene a través de que en oriente en esa época se creía que muchas de las religiones practicadas eran de carácter pagano y practicaban la alquimia, la herbolaria y demás disciplinas que estaban consideradas mágicas entonces.

La historia más difundida respecto a estos misteriosos personajes es la que cuenta que los tres reyes magos del oriente se dirigían a su destino guiados por una estrella conocida como “la estrella de Belén” , la cual evitó que éstos personajes se desviaran de su camino y tuvieran éxito  en la misión que se habían encomendado.

Respecto a los nombres que se utilizan para identificar a los tres reyes magos: Melchor, Gaspar y Baltasar, aparece por primera vez en la iglesia de San Apolinar Nouvo en Rávena, Italia, en el friso de los reyes magos, hecho a través del uso de pequeños mosaicos que forman una imagen de estos tres personajes representados como un hombre blanco y barbado, uno de tez trigueña y otro de piel oscura, por lo que a partir de entonces se asume que éstos personajes  representan las tres razas que habitaban en oriente.

La tradición de que estos tres personajes lleven regalos a los niños buenos durante la noche del 5 de enero se tiene mucho más arraigada en los países de habla hispana y se considera una de las más hermosas tradiciones que generan ilusión entre los niños y ésta se acompaña de una celebración con un delicioso pan llamado “Rosca de Reyes”, la cual, al menos en México, se acompaña con una taza de chocolate caliente.

La Rosca de Reyes contiene,  dentro del delicioso pan que simula una corona decorada con frutos secos que simulan las joyas incrustadas en el oro, unos pequeños muñecos de plástico que tienen el objeto de representar al niño Jesús y quien lo encuentra cuando la come le espera un año lleno de bendiciones.

Luego de esta deliciosa cena, los niños deben irse temprano a dormir para que al día siguiente puedan encontrar sus hermosos y deseados regalos.

La leyenda de los Reyes Magos  es una parte de la literatura bíblica que aún continúa viva después de muchos siglos de historia y aunque el tiempo sigue pasando y las ilusiones de los niños cada vez están más enfocadas a la tecnología, la ilusión en ellos sigue viva y seguramente las futuras generaciones mantendrán esta leyenda por muchos años más.