Guanajuato, Gto. 31 de julio de 2014.- Luego de las críticas del INAH en el sentido de que algunas no son acordes a la ciudad y habría que retirarlas (aunque no precisó cuáles), el director del Museo Iconográfico del Quijote, Onofre Sánchez Menchero, defendió la permanencia de las esculturas de Nierman, Sacal, Santiago, Gutiérrez y Cuevas, que están en las calles del centro histórico de Guanajuato capital.
Como se sabe, el Museo Iconográfico del Quijote es propietario o gestor de La Giganta de José Luis Cuevas, una pieza de 4 metros, réplica de una original que mide el doble y que está en el propio Museo José Luis Cuevas y de un Quijote, de Víctor Gutiérrez, que está a la entrada del Museo.
Por su parte, las obras de José Sacal, Ángel-Quijote; y otro ángel, pero este de Leonardo Nierman, son obras abstractas que fueron emplazadas a lo largo de la calle donde estña el Museo, muy cerca de la de Sebastian, escultor de piezas monumentales construidas en acero y concreto, que también están hechas geométricamente, las cuales son quizá más modernas que el contexto que las alberga.
Sobre la permanencia de las piezas, Sánchez Menchero propuso en entrevista la creación de un cuerpo colegiado, en donde haya representantes de entidades como la Universidad de Guanajuato, los gobiernos del estado y municipal, el cronista de la ciudad y urbanistas, entre otros, para que opinen si deben ser retiradas o reubicadas en otros puntos de la ciudad.
El director del Museo del Quijote anunció que hay otras 3 esculturas de tamaño importante de las que ya comenzó a gestionar su colocación y se ha hablado de manera preliminar que sería en la entrada de la plaza Cervantes y una más en la plazuela del Ropero, donde por cierto ya hay una escultura que, según dicen, retrata a Jorge Negrete.
En sus propias palabras, Sánchez Menchero dijo: “tenemos unas 3 o 4 esculturas guardadas en la ciudad de México; en un momento dado yo lo comenté con el actual alcalde (Luis Gutiérrez), de ver la posibilidad de si en la entrada a la plaza de Cervantes colocar una de ellas y él desde el principio me dijo que sí, que lo hiciésemos, pero le pedí que hubiera un apoyo por parte del municipio”, reveló.
Comentó que todas las esculturas que son propiedad de Museo, “los costos de instalación, de las bases, de la iluminación han sido por parte del Museo”, precisó para concluir.
