Cervantes no es solo “El Quijote”

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Liliana Magdaleno

Guanajuato, Gto. 16 de octubre de 2016.- A la par de la realización de la fiesta del espíritu, se llevó a cabo una edición más del Coloquio Internacional Cervantino. Este evento se especializa en convocar a profesionales de la literatura, todos ellos con un fin específico: estudiar a Miguel de Cervantes desde distintos ángulos. Vida, obra, poética, herencia cultural, etcétera.

Cervantes escribió muchas más obras (Foto Cortesía del Festival Internacional Cervantino)
Cervantes escribió muchas más obras (Foto Cortesía del Festival Internacional Cervantino)

Aunque cada año nos visitan distintas personalidades, todas con perspectivas diferentes del tema cervantino, es evidente que la cultura en relación al escritor español continúa centrada en la que llamamos su obra cumbre, El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha. Obras como La Galatea, o las Novelas ejemplares (La ilustre fregona, La fuerza de la sangre, El amante liberal, entre otras) son desconocidas por el imaginario popular, que al remitirse a Cervantes, automáticamente piensa en un hombre sobre un raquítico caballo, mirando hacia los molinos de viento. Además, Miguel de Cervantes tuvo otra faceta, casi desconocida: la de poeta. Escribió un gran número de romances y  todos pocos conocidos.

Críticos y escritores toman al ingenioso hidalgo como bandera y convierten al Coloquio Cervantino en “Quijotino”. Este espacio, que no está abierto únicamente para especialistas de las letras, sino que en ocasiones funciona como punto de encuentro y divulgación, ha dejado de lado obras externas al Quijote (¿quién ha discutido sobre Viaje al Parnaso?).  Distinto ha sido en otras disciplinas dentro de la programación del FIC, en el que (aunque son las menos) se han presentado obras como Numancia, presentada por la Compañía Nacional de Teatro, y Los trabajos de Persiles y Sigismunda, a cargo de la Orquesta Nacional de España. El Teatro Universitario continúa rescatando los Entremeses Cervantinos en cada edición del festival; no obstante, a la literatura le está alcanzando apenas para repetir temas que se han estudiado por años.

Respecto de la vida de Cervantes, Hugo Hiriart y Carmen Boullosa se presentaron para platicar generalidades del escritor, sin evitar aludir a la obra del Quijote. Escribe Luis Felipe Lomelí, en un texto para Centrales:Cambie usted el cuello ridículo de Miguel de Cervantes y póngalo como el soldado que fue en Lepanto. Deje de regodearse en sus desventuras cortesanas y narre su cautiverio entre los musulmanes como prisionero de guerra. Entonces verá cómo entre los adolescentes Cervantes comenzará a despertar interés y no bostezos”. Aunque esta afirmación resulta un tanto tajante, es necesario repensarla con un objetivo específico: la apertura hacia caminos distintos, con una consecuente renovación de los clichés cervantinos.

Será necesario que, en próximas ediciones, la figura de Cervantes no esté atada al Quijote y a su rocín, ni a esos ideales que se le han achacado más por costumbre que por conocimiento genuino. La exploración de la obra de manera integral, en eventos que están dedicados exclusivamente a un autor, merece espacios para una discusión extensa y profunda, en este caso, de Miguel de Cervantes Saavedra.