Guanajuato, Gto. 20 de octubre de 2016.- Los jueces que estén a cargo de temas delicados que pudieran poner en riesgo su vida, deberían de contar con seguridad o bien ir pensando en ese tema, en referencia al asesinato del juez leonés Vicente Antonio Bermúdez en días pasados, por lo que se tendrán que poner policías y camionetas blindadas por seguridad.
Así lo consideró Miguel Valadez Reyes presidente del Supremo Tribunal de Justicia y del Consejo del Poder Judicial de Guanajuato, quien señaló que la protección policiaca sería de manera excepcional y como un segundo complemento.
“Que nos dotarán de un par de vehículos para sobre todo cuando hay que trasladarse en horario no convenientes para que tuviera el vehículo alguna seguridad, de manera que entonces sería mínimo lo que tendríamos que reforzar para que tampoco alarmar a nadie”, consideró.
Y manifestó que dichas solicitudes no son desmesuradas a como están las cosas en el país pues sería para casos muy específicos que ellos mismos detectaran como casos de alto riesgo y dijo que ya se ofreció algún tipo de seguridad que es aleatorio para los jueces que están de turno, por medio de un sistema de cómputo y sobre el resguardo, “es más complejo”.
“La ejecución del juez en el Estado de México es reprobable y pone en evidencia que también está en riesgo la vida en sus actividades personales, porque desde el punto de vista que cada juzgador, es precisamente emitir veredictos a veces que tiene que ver con la vida de la persona, con una condena, tiene riesgos muy graves y que es imprescindible poner atención en lo que esto significa”, enfatizó.
Y dijo que como juez en derecho penal se asume la función, plenamente consciente de que debe tener entereza, valentía, arrestos necesarios para enfrentarse a situaciones complicadas, cada día más difícil.
“Esto en lo que toca a nosotros en Guanajuato, puede parecer lejanos, no es así, nosotros manejamos día a día y cada vez más asuntos que tiene que ver con delincuencia organizada, por lo que se debe de pensar en el tema”, concluyó.
