LA VIDA SECRETA DE LOS JUGLARES DE GUANAJUATO

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Hay juglares que actúan un día y son buenos;  hay otros que actúan un año y son mejores; pero hay juglares que actúan toda la vida, esos son los chidos.  

Bertolt Brecht y Botellita de Jerez. 

Hay estrellas fugaces que cruzan el firmamento bajo la mirada sorprendida de un público anónimo que celebra la vida,  descubriéndose asombrados ante la fragilidad humana; hay otros rockstars que son pedantes e insoportables, que nadie recordará con el paso del tiempo porque son totalmente prescindibles,  y están los verdaderos artistas que pasan por la vida pisando fuerte y que dejan una huella enorme e imborrable en algún momento (o en muchos) de nuestras vidas, esto pasa con los Juglares de Guanajuato. 

Apenas esta semana (12 de agosto 2021) cumplieron 49 años de vida artística y aunque suene fácil decir el número, estoy seguro que esos 17 mil 885 días que han hecho vida grupal, casi conyugal,  no cualquiera los aguanta, no por nada hay agrupaciones que se divorcian antes de cumplir el año. 

Si usted conoce a alguno de los integrantes de este famoso grupo cuevanense,  ya sabrá que cuando actúan ante el público que regularmente los adora, son extraordinarios, como si se prepararan para asumir un papel distinto al rol que llevan en su vida cotidiana, pero no, en este caso así son, legítimos, y como dice el dicho, Dios los hizo y ellos se juntaron.  

Pues bien, ya sabrá también que como los superhéroes,  casi todos llevan una doble vida, y andan siempre ocupados atendiendo sus asuntos de personas  ¿normales?,  persiguiendo la chuleta pues, realizando sus profesiones y oficios. Por eso hicimos una entretenida entrevista vía Whats app, con Javier Cardoso, joven sesentón,  que amable accedió a contestar algunas interrogantes, sobre esa actividad polifacética que tiene que ver con la actuación, la cantada, la bailada, la poesía, la oratoria,  la creación, etc., cuya muestra ha quedado reflejada en libros, anecdotarios  y más recientemente en las redes sociales, pero nunca como en las plazas donde se han rendido al público conocedor, que los ha aclamado después de cada función.   

¿Cómo van a celebrar su aniversario?. 

Hoy lo celebraremos a distancia entre nosotros, con una llamada, un brindis con vino o sin él (puede ser café, té, refresco, agua, etc.). Generalmente lo festejamos hasta el primero de noviembre en la función de muertos, pero no pasa desapercibido el 12 de agosto, y como hay que cuidar a los viejitos, así será el festejo. 

¿Hay juglares que se los haya llevado la pandemia? 

Hasta el momento no tenemos conocimiento de que algún juglar se lo haya llevado la Pandemia, se los ha llevado la Huesuda, la Calaca, la Parca, la Pelona, la Dientuda, la Catrina, Mictlantecuhtli, la muerte, etc.

¿Qué te deja ser juglar? 

Me ha dejado tolerancia, empatía , amistad, conocimiento diverso y conocimiento de lenguaje corporal, esto entre tantas muchas cosas, como la igualdad entre personas y el respeto a ellas y a todo nuestro entorno. El saber que puedes hacer una labor social llevando mensajes positivos a la gente por medio del humor, aclaro,  debe ser un humor fino,  para que se quede el mensaje; pero sobretodo he aprendido que el pasado, ya se fue, el futuro no sabemos si llegue, pero sí tenemos el día de hoy para ser felices.

Compártenos las tres primeras anécdotas que te vengan a la memoria.  

La primera,  el haber tenido público de todo, en Pátzcuaro,  Michoacán, en una Muestra Nacional de Teatro, donde nos presentamos en la plaza Quiroga. 

Gustó tanto la presentación que recibimos el reconocimiento de lugareños, turistas y de gente de ahí, muy humilde,  que se acercaron a saludarnos.  Entre ellos un barrendero que de entre sus ropas sacó unas monedas y nos las dio, las recibimos por respeto y su insistencia;  aún las conservamos. Niños que vendían chicles nos obsequiaron unos paquetitos. Nosotros felices 

La segunda,  es que   para un Festival Cervantino  en el sexenio de Miguel de la Madrid, vino su esposa Paloma y quería ver a los juglares. El arquitecto Eduardo Knapp, nos contactó. 

La función sería afuera del Teatro Juárez, que dicho sea de paso,  fuimos los primeros en usar ese escenario callejero,  a la señora Paloma la llevaron a otros eventos antes. 

Ella y su comitiva fueron a ver la obra Dos Hombres en la Mina, y a algún otro evento. 

Ese día a excepción mía,  todos llegaron tarde, precisamente porque participaban en  la obra antes citada. Llegué a la calle enfrente del teatro y  la señora ya nos estaba esperando, enseguida  me preguntaron por los demás Juglares, ya vienen les dije, pero el público bastante numeroso empezó a aplaudir exigiendo que se iniciará la presentación. 

Inicié solo, la señora se sentó en las gradas  (escalinatas) y ya al segundo número donde estaba yo haciendo dos papeles a la vez, llegó Rogelio y terminamos ese sketch, así fueron llegando uno a uno e incorporándose a la función, que hizo olvidar la tardanza. 

La tercera, fue en otra Muestra Nacional de Teatro en Jalapa, Veracruz, hicimos como de costumbre una presentación de parodias de las obras de teatro participantes.  Simplemente fue mágica yo andaba afónico y no podía hablar, de hecho no pensaba participar, pero ante la insistencia de Pepe Araujo, participe en la preparación que nos llevó unas 8 horas. 

Esta presentación era sólo para participantes, actores, directores, escritores escenógrafos, tramoyistas, pura gente del medio. La magia fue que unos 5 minutos antes de la función ya podía hablar, gracias a un remedio que me dio un soldado unas horas antes.  Participé y la función fue todo un éxito, gracias a que todos estábamos en la misma frecuencia y al terminar todo el público de pie aplaudiendo y formados para felicitarnos, entre ellos Martha Luna, Emilio Carballido, y grandes actores  profesionales de teatro. 

¡Felicidades por un año más Juglares de Guanajuato, Larga Vida! 

PD. Ya sé que el título no tiene nada que ver con el texto, pero aproveché una de las recomendaciones del márquetin mediático, para llamar su atención.