EL BALCÓN DEL PALACIO. Hace casi un mes que los nuevos señores del Palacio de las Enredaderas, en la Villa de la capital del estado, tomaron posesión de sus curules y parece que no pasa nada, aún le siguen midiendo el agua a los elotes.
Lo cierto es que no hay nada nuevo en la Cámara de Diputados, además de las sesiones kilométricas en donde el gusto por el protagonismo ya quedó en evidencia, en algunos casos se muestran tablas y experiencia en el armado del discurso, a pesar de que las iniciativas sean recicladas y las banderas nada nuevas.
Ahí la que ondea más alto es la bandera AntiZamarripa, que ya ni siquiera llama la atención, porque toda la legislatura anterior en Morena probaron con calificativos, ofensas y todo lo que pudiera resultar de impacto en contra del ex procurador.
Por otro lado, es evidente la experiencia que trae la ex diputada panista, Alma Alcaraz Hernández, que ahora con las siglas de Morena en el pecho y después de salir victoriosa de años de lucha en contra de su compañero de partido, Ernesto Prieto Gallardo, por el dominio del partido en el estado, luce el dominio del esgrima verbal en la tribuna más alta y se puede decir que es evidente el mayor liderazgo que tiene entre sus pares del partido marrón, luego del resbalón mediático del coordinador de la bancada, también Ernesto, pero de apellidos Millán Soberanes.
El jefe de asesores de la mayoría panista en el Congreso del estado, Luis Mario Aguilar y Maya, seguramente está preocupado porque se encontró un escuadrón de asesores muy disminuida porque muchos se movieron de lugar, por irse a algún otro cargo, renuncia, etc.Imagínense como están las cosas para llamar al ex jefe de asesores del grupo parlamentario saliente, Jorge Luis Hernández, mejor conocido por el mote del Monstruo, para reforzar al equipo.
IBARGÜENGOITIANAS. La tierra del señor Ibargüengoitia, está llena de simbolismos, simulaciones y contrasentidos.
Lo mismo se puede ver a los más destacados panistas de la entidad, celebrando al ex priista, ex perredista y ahora Morenista Porfirio Muñoz Ledo, el prócer aquél que exigió el Derecho de Sangre para ser candidato a gobernador de Guanajuato y que acabó levantándole la mano al candidato del PAN Vicente Fox, que a los actuales diputados morenistas en la cámara local, jalando cada quien por su lado porque obviamente, no son iguales.La mayoría salió de algunos de esos tres partidos antes mencionados PRI; PAN, PRD, y traen otra formación –¿o deformación? Política.
Ya no hay el menor recato en mostrar el verdadero rostro del político contemporáneo o moderno, que puede ser pluripartidista, pragmático, o más simple, lo mismo son de chile, de dulce o de manteca, o como ya lo habíamos afirmado, en este país no hay partidos políticos, sino clase política.
Y MIENTRAS TANTO EN EL ATENAS DE POR ACÁ. El espíritu de Cervantes ha regresado a la ciudad que vio lo nacer hace 49 años, sin embargo, llegó azotado por la pandemia, más flaco que de costumbre y con unas ojeras de perro panteonero que habrase visto. Hasta pena daba.
El vaticinio empezó desde hace 3 años en el 2019, con el cambio de dirección, el recorte de recursos; el año pasado se suspendió por los protocolos de salud que se impusieron con el Coronavirus.
Los cambios en la fiesta Cervantina tienen mala pinta, porque hasta en lo más básico se hace evidente, por ejemplo, los servicios en la Sala de Prensa donde se cuidaba hasta lo más básico que puede ser un gafete que acredite a algún reportero, tenían candados de seguridad, ahora es un pedazo de cartulina o papel anaranjado sin foto y solo con un número de folio.
En el trámite tiene que entregar una prueba reciente de que no tiene COVID, lo que está justificado, una carta del medio firmada por el gerente, su credencial de elector; la cartilla de vacunación del perro, etc.etc..Para que tenga una idea, el compañero Crescencio Torres, fotógrafo de los Soles de Guanajuato, que recibió un reconocimiento del Comité Organizador del propio Festival Internacional Cervantino, no estaba acreditado. Así cómo.
