Cuando era niña acostumbraba mirar las estrellas, con la cabeza hacia el cielo, escudriñaba al universo y la curiosidad aumentaba su deseo de ser científica; ahora, después de mucho tiempo, solo quedan en el recuerdo esos instantes experimentados en su casa ubicada en Marfil; pero esa inspiración de niña le ha impulsado hasta lograr que algunas instituciones internacionales la mencionen con posibilidades de ganar el Premio Nobel de Química.

La historia de Tessy López Goerne bien puede considerarse como la de una auténtica guerrera porque ha vencido todos los obstáculos que la vida le ha puesto, como haber padecido 7 tipos de cáncer y haberlos vencido, su secreto es la nanomedicina catalítica, una rama de la ciencia inventada por ella misma.

Se dice fácil, pero entre esos “gozosos sueños infantiles” y sus aportaciones a la ciencia médica han transcurrido 40 años llenos de trabajo, reconocimientos, e incluso, humillaciones, por ejemplo, recuerda que luego de haber cursado la educación básica y la preparatoria en Guanajuato, se inscribió en la Universidad Autónoma Metropolitana en la carrera de físico- química y en su primera clase, el profesor les dijo a las 2 únicas mujeres que integraban el salón : “ustedes solo van a estar aquí 2 ó 3 semanas, porque las mujeres solo vienen a buscar marido”.

La joven de 18 años salió al pasillo a llorar y con el apoyo de su padre supo sobreponerse; finalmente, el profesor fue despedido de la universidad. El insulto le hizo comprender que aún ahora las oportunidades para la mujer en el campo de la ciencia no han cambiado mucho, asegura que hay mucha discriminación, y los puestos en los grupos de investigación son para los hombres.

Después, comenzó a trabajar en Petróleos Mexicanos, ahí aumentó su interés por el estudio de los materiales a nivel atómico e inició el estudio de la nanotecnología, rama de la ciencia, que repetimos, ella es pionera en el mundo.
Pero, ¿qué es la nanotecnología?, en términos sencillos, es el estudio de partículas que son un millón de veces más pequeñas que un milímetro. Tessy López Goerne lo explica en una forma más concreta: “¿te imaginas a una hormiga, la más chiquita?, pues las partículas son un millón de veces más chiquitas que ella”.

Con esos conocimientos, fue invitada por el Instituto Nacional de Neurocirugía y la Autónoma Metropolitana a crear un laboratorio para investigar más y combatir el cáncer cerebral; sus investigaciones dieron como resultado un método por el cual se sintetizan sustancias que atacan a las células cancerígenas de una manera más efectiva que otros métodos. ¿Cómo se logra esto?, la propia doctora así lo explica: “en un tratamiento normal, el paciente toma sus medicamentos, los cuales recorren todo el sistema circulatorio hasta llegar al órgano afectado; con este método, la medicina llega directamente al órgano afectado, y con el auxilio de las nanopartículas, lo penetra y destruye una por una a las células cancerígenas”.

PIE DIABÉTICO

Otra importante aportación es haber creado un gel con el cual se cierran las heridas del pie diabético, con el mismo método de las partículas pequeñas, de esta forma ha impedido que a muchas personas les amputen el pie.

SU VIDA EN GUANAJUATO

Después de irse a estudiar a la Ciudad de México, pocas veces ha regresado a Guanajuato, por eso recuerda a su tierra con cariño: “me encantaba bailar en la discoteca, pero mi mamá no me dejaba ir mucho porque aseguraba que una muchacha no debe dejarse ver tantas veces ( ja ja ja ja); los domingos nos dejaban pasear después de la misa del mediodía ; a veces por las tardes nos sentábamos sobre la escalinata del Teatro Juárez y enfrente pasaban los muchachos”.

Así es esta mujer, tan profunda y tan sencilla, la que además del cáncer en diversas partes de su cuerpo, sufrió un infarto cerebral que le afectó el movimiento, pero esto no le ha impedido dar conferencias en silla de ruedas, atender a sus alumnos y continuar sus investigaciones.

Ella asegura que estos son los pilares que sostienen su vida: ayudar a la gente – “porque la ciencia es para servir”- sus hijos, y su fe en Dios.

Una científica con fe en Dios. ¡Increíble!.