Desde el Faro

Nuevo libro de Pedro Vázquez Nieto, experiencias de vida gozosa

Compartir

Al hojear “Del Amor, un día”, el nuevo libro escrito por Pedro Vázquez Nieto, el lector encuentra en cada página, historias que lo incitan a vivir a plenitud, como seguramente, el escritor y abogado guanajuatense lo ha hecho; tomo por ejemplo, las primeras líneas de un poema que dice: “Ciego y tenaz abro las velas, sabiendo que al mar y al arrecife me llevará, colmando todo, el aire, a bogar en la paz de la planicie, o atracar en las mariposas de la espuma”. Abrir las velas y que el viento nos lleve a donde sea, y el mismo aire nos dirá qué hacer el día de nuestros días, parece decirnos el auto.

En cualquiera de las 151 páginas el lector se tropieza con esas historias de una experiencia radiante, gozosa; “La vida es un circo de cuerdas flojas, lleno de emociones y milagros, de saltos sin red y de trapecios, de fieras sin la jaula…el circo es un sueño de celofán. Vale la pena pagar la entrada, para aprender a volar, con un júbilo de mariposas”, dice el autor en otro de sus poemas.

A “Cachú”, alguien a quien Vázquez Nieto seguramente quiso mucho, le dice: “aprendí a morir contigo, a aceptar lo ajeno de la vida, a tocar los límites sin amargura, a ir soltando las amarras de lo que amamos, de lo que nos une, a lo que pertenecemos”. Al continuar en su ámbito muy íntimo, dedica un texto a “Pía”: “te conocí y de pronto supe cómo amar la luz que tras de ti va, también te sigue la montaña, dice de ti lo que tu mirada ya sabe…”.

Con la palabra y la sensibilidad, sus principales aliadas, el poeta también abraza a sus amigos, como “Don Eugenio”, a quien le dice: “tanto hizo el León sobre la tierra, que hará falta cuando falte, nada podrá suplir su enorme huella, por eso no dejamos que nos falte”.

“Del Amor, un día” es sin duda, el reflejo de una vida ejemplar, porque como dijo Juan Luis Miguel Serrano, presentador de la obra: “Pedro Vázquez Nieto ha logrado lo que pocos: hacer de su vida una obra de arte”.