El espacio de Escipion

#Ayotzinapa, filtraciones, periodismo, derecho y justicia

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La publicación de una columna y un hilo en la red sociodigital Twitter de la periodista del diario Reforma Peniley Ramírez de una parte del informe de la Presidencia de la Comisión para la Verdad y el Acceso a la Justicia del Caso Ayotzinapa sin testar provocó revuelo en las redes sociodigitales y gran parte de la prensa de opinión en estos días.

Posiciones divididas de periodistas y formadores de opinión a favor y en contra, entre el bien y el mal, entre lo ético y lo políticamente correcto; un debate que dejó ver la fuerza de la consigna oficialista y la rabia antiobradorista. Pontificadores del “buen periodismo” contra el “antiético”. Desde que en enero de 2009 Julio Scherer García, el legendario director de Proceso publicó una fotografía y una entrevista al narcotraficante Ismael “El Mayo” Zambada. A sus críticos que le cuestionaban falta de ética y hasta de servir a los intereses del cártel de Sinaloa, les espetó: “Si el diablo me da una entrevista, me voy al infierno”. Y ahí parecía haber acabado con los pontificadores que quieran dar clases de moral a los periodistas.

A ocho años de la trágica desaparición de los normalistas de Ayotzinapa en el municipio de Iguala, esta última filtración sumada a la incursión mediática del general José Rodríguez Pérez, la campaña que está haciendo Alejandro Encinas defendiendo los resultados de su Comisión, más la que estarían preparando los defensores de Jesús Murillo Karam, muestran tres versiones y sus narrativas que se disputan el consenso de la colectividad mediática y el juicio de las redes: la de la Procuraduría de Peña Nieto, la de la Comisión encabezada por Encinas y la del Ejército. El periodismo y los periodistas, en medio de esta disputa, muchos como instrumentos y muy pocos a ayudar a despejar todas las dudas que se tenían y que ahora se han sumado más.

Peor aún, a ocho años, el Estado de Derecho está haciendo agua por la serie de violaciones al debido proceso que se han venido registrando desde el primer día. Un ex procurador general detenido, un ex fiscal prófugo, un ex procurador de Guerrero exonerado, un ex gobernador que no ha sido citado y a ello se suma el hasta ahora fiscal del caso, Omar Gómez, quien renuncia por diferencias con la Fiscalía General de la República y por las filtraciones que se han dado. Ningún dirigente político ha sido llamado a cuentas y, quienes encumbraron a José Luis Abarca, ni siquiera han ofrecido una disculpa pública, un humilde perdón. De las 83 órdenes de aprehensión que informó la actual Comisión tener listas, en las dos últimas semanas se conoce que 24 han sido liberados de las imputaciones, entre ellas 16 que eran para militares.

En estos ocho años han muerto asesinados o por “enfermedad” criminales y actores claves para llegar a la verdad absoluta como el propio líder de Guerreros Unidos “Mario Salgado Covarrubias, “El Sapo”; así como Humberto Velázquez, “El Guacho”; Moisés Brito, “El Batman”; Marcos Esteban, el militar identificado como “El Caminante”; y José Luis Hernández, el entonces director de la normal de Ayotzinapa.

Las filtraciones de documentos, conversaciones o información obtenida extralegalmente es una práctica política y jurídica tan añeja como la historia misma del periodismo. Se utiliza para ejercer presión y desatar conclusiones.  Ejemplo de esto ha sido el reality show de la gobernadora de Campeche, Layda Sansores, quien expuso audios obtenidos de manera poco clara para presionar y doblar a Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas. 

Desde que inició sus trabajos la llamada “cuarta transformación”, ya sea la Comisión o la actual Fiscalía General han sido constantes las filtraciones del expediente a medios y portales tan oficiosos y no tanto como Milenio, Sin Embargo, Proceso y Reforma, declaraciones del criminal Gilberto López Astudillo, alias “El Cabo Gil”, el “testigo de oídas” quien dice que Jesús Pérez Lagunas, “El Güero Mugres”, le dijo toda la verdad, misma que hasta el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) ha sido tomada con reservas.

Hace poco, el mundo periodístico celebraba el medio siglo del famoso caso del Watergate, el caso de espionaje político que le costó la presidencia a Richard Nixon. Gracias a las filtraciones de documentos especiales también ha sido posible conocer la conexión Irán- Contras-Cártel de Guadalajara que por poco tumba la presidencia de Ronald Reagan. Y la vulneración de comunicaciones privadas consideradas “razones de Estado” por los Estados Unidos es que Julian Assange enfrenta su actual circunstancia.

Sin embargo, esta práctica de filtraciones dolosas también ha sido utiliza para denostar o dañar la reputación de figuras públicas, sobre todo si están en campaña. El propio Departamento de Estado de nuestro país vecino ha utilizado este tipo de recursos para sus operaciones psicológicas y de propaganda en los derrocamientos de Allende en Chile, de Joao Goulart en Brasil, de Mossadegh en Irán o en la Guerra del Golfo.

Raúl Trejo Delarbre, reconocido investigador de los medios y la comunicación política, lo publicó con claridad en uno de sus libros: “Las filtraciones son útiles para el periodismo, pero jamás lo reemplazan. Cuando se limitan a publicar versiones que otros les han dicho y sin verificarlas, los medios se convierten en correveidiles de intereses ajenos al periodismo. Las filtraciones pueden ser recursos, siempre de excepción, para seguir la pista de asuntos que de otra manera no habrían sido conocidos. A partir de ellas el periodismo profesional coteja, contrasta, corrobora; es decir, investiga”.

Más allá de los pontificadores del periodismo políticamente correcto y de las disfuncionalidades de las investigaciones, los padres de los 43 normalistas el día de ayer difundieron su posicionamiento en el que acusan que: “Este gobierno criminaliza nuestra forma de lucha y protesta. Se acuda al fantasma de la infiltración e intereses ajenos en las protestas para descalificarnos, invisibilizando e invalidando nuestro dolor y digna rabia”.

Y van más allá: “Para frenar los pocos avances en el caso, se abren guerras intestinas dentro del gobierno, golpeando a funcionarios que muestran compromiso con el caso, relegándolos y restándoles mérito al trabajo que realizaron, creando un ambiente enrarecido que frena el avance del caso. De igual forma el propio gobierno filtra a los medios de comunicación partes sensibles de la investigación para obstaculizar los procesos judiciales y el acceso a la justicia. Se usa nuestro caso para que un poder del Estado golpee políticamente a otro, se culpan mutuamente por los fracasos judiciales, por su parte los perpetradores se engallan y tienen voz en los medios de comunicación. Mientras nosotros, como víctimas pasamos tragos amargos de la impunidad que acrecienta nuestro dolor y sed de verdad y justicia”.

CORCHOLATERO: GRUPO FIRME EN EL ZÓCALO con #EsClaudia. El grupo musical de mayor popularidad en México es el «Grupo Firme», compuesto por jóvenes originarios de Coyuca de Catalán, Guerrero, pero que en Tijuana han despuntado binacionalmente. La agrupación, según Forbes, tiene una trayectoria administrativa muy precisa. Musicalmente, el éxito radica en haberse colgado del género que fue impulsado en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari desde fines de la década de 1980 para bajarle a rock en español y la música latinoamericana y de protesta, que sin duda era parte de la formación política entre los jóvenes que participaron activa y electoralmente contra el PRI en las elecciones del 1988.

La música de banda, pomposamente y comercialmente denominada «regional mexicano», pasó del romanticismo ranchero a una tendencia por hacer apología de líderes criminales y en letras de vulgar hostigamiento sexual, violencia de género y respuesta machista al empoderamiento femenino. Sinaloa y la Tierra Caliente de Michoacán y Guerrero, son considerados los mayores productores de música de banda y narco-corridos en México…. #AdánVa al Senado, trabajando de la mano para resarcir diferencias con Ricardo Monreal y tejer fino para que la reforma militarista avance… #MarceloSí viaja y viaja para representar al presidente de México y tratando de fortalecer sus alianzas con los experimentados operadores políticos que viene trayendo desde que tenía el Partido Centro Democrático con su mentor, Manuel Camacho Solís.

CONTACTO: feleon_2000@yahoo.com