La obesidad va para largo

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Carlos Olvera

Guanajuato, Gto. 30 de agosto de 2010.- El control de la obesidad y el sobrepeso no se logrará en el sexenio o en unos cuantos meses, sino que los cambios permanentes llegarán hasta dentro de 15 ó 20 años, advirtió el vicepresidente de la Sociedad Mexicana de Endocrinología, Carlos Robles.

Dr. Carlos Robles, endocrinólogo

En entrevista en Guanajuato capital, el médico señaló que al país le llevó 40 años, de 1970 a 2010, asumir la realidad que vivimos en materia de obesidad y las cosas no cambiarán de la noche a la mañana.

“Este problema se incubó en los setentas y ahorita estamos viendo los resultados y llevará, probablemente, la mitad de años en resolverse; en 15 ó 20 años las cosas podrían empezar a cambiar si somos razonables”, indicó.

El especialista dijo que no es posible cambiar una situación que se gestó en años, en unos meses. También advirtió que no es cambiando únicamente lo que deben comer los niños en las escuelas como se solucionará el problema.

“El cambio debe de ser más grande, el tiempo de los niños en las escuelas es muy poquito y las cosas de las dietas, el cambio de los alimentos altamente energéticos y de muchas calorías, apenas significan el 30 por ciento”, añadió.

Por el contrario, los niños consumen entre el 70 y 80 por ciento de esos alimentos en casa “además los niños pequeños ni siquiera van a la escuela”.

Para aclarar la situación el endocrinólogo enfatizó que “la obesidad se engendra o se genera en casa, ahí se perpetúa y ahí progresa; es ahí donde debe comenzar a atenderse; en los hospitales lo debemos atacar hasta que no haya las grandes obesidades monstruosas, de niños extra grandes o ver los problemas que ha generado la obesidad, pero la obesidad como tal no es un problema que resuelvan los médicos ni las autoridades de salud: es un problema de educación”, resumió.

Robles consideró que si se pretende acabar con la obesidad y el sobrepeso solamente con sacar la comida chatarra de las escuelas la estrategia es insuficiente. “La estrategia a mediano y largo plazo va a ser educar a las futuras madres, a llevar una especie de microeconomía familiar sana; un microambiente en la que la gente esté con factores que le favorezcan más su desarrollo sano”, concluyó.