Carlos Olvera
Guanajuato, Gto., 25 de octubre de 2010.- La mayoría del público del grupo Qué Payasos, es multigeneracional; es decir muchos de los padres que ahora llevan a sus hijos a ver el espectáculo, también cuando fueron niños disfrutaron de sus rolas, pues ya llevan más de 28 años haciéndole a la payasada cantada.
En los conciertos muchas de las expresiones que llegan hasta el dramático llanto son “es que me regresaron el casete y me acordé de mi niñez”, “me acuerdo que los veía en la tele los sábados” y esas cosas por el estilo.
Beto Batuca dice que la de ellos “es como una forma de vida… una debida forma, de llevar la vida”, le completa Nacho Mostacho; “porque si no, no estaríamos aquí —tenlo por seguro— y estaríamos en otro lado”, dicen en entrevista.
En cuanto a las rolas, dice Beto que no les da para mucho la inspiration, “somos todo lo contrario de Juan Gabriel, él puede hacer canciones en el baño, en la playa, en la areniza a la hora de estar haciendo su tejido; o como José Alfredo que hacía las canciones silbando, otros las hacen mientras se duchan”, pero a ellos se les complica mucho.
“Para que a mí me salga una rola necesito la ayuda de muchos amigos y de inspiración y no me llega, no me llega y a mi compadre (Nacho Mostacho), sí le llega, pero siempre tiene el rechazo de mi parte: no, no sirve… hasta que la ponemos en tela de juicio (sin albur) con el público y él dirá si le gusta, o no, si se le pega, le dice algo o no”: Siendo prácticos es si tienes algo que decir pues dilo, sino cállate el hocico”, acota.
“Y si te vas a callar guarda silencio”, añade Mostacho.
¿Cuántas piezas tienen? “Bueno tenemos dos recámaras, cocina…”
“¡Canciones!, perdón!,… en nuestro repertorio incluyendo las de Agustín Lara son más de 600 las de Agustín y si incluimos las de Juan Gabriel, son como mil 600 canciones, más 5 de nosotros, y nos han costado un trabajo…y se nos olvidan las letras”, dice Beto.
“Bueno son muchas, pero como diría Arturo de Córdoba, no tiene la menor importancia. Nosotros nunca hemos tenido un top ten, en nuestros brazos; de mujeres si hemos tenido pero en la radio no, nunca nos han programado, pero que ni nos programen, la gente nos tiene en sus casitas y sus corazones”, dice confiado.
“Tenemos 28 años y un tercio. Tercio es otro Wey que trabaja con nosotros… son 28 años de carrera”. Sin embargo no es fácil para permanecer así, tratan de no estar juntos “porque estaríamos como marido y mujer que se están peleando y no se quieren, como mar y posa, como Milk y Wey, como Solaz y Esparcimiento como Sana y Diversión”.
Esta es su 4 participación en el FIC y aseguran que más les gusta de Guanajuato, “más que el FIC, son sus tortas Guacamayas, su mole poblano, sus enchiladas potosinas. Son una delicia”, concluyen.
