Canirac Guanajuato pedirá respaldo nacional contra efectos de la alerta de EE.UU.

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Carlos Olvera

Guanajuato, Gto. 23 de febrero de 2011.- Mauricio Burstein Campos, titular de la presidencia de la Canirac en Guanajuato capital, aseguró que convocará a los integrantes de la Cámara a nivel nacional para tratar de revertir los efectos negativos de la alerta de seguridad norteamericana emitida hace unos días y que coloca a la entidad como un lugar de riesgo para los ciudadanos de ese país.

En este sentido señaló: “Lo primero que tenemos que hacer es a través de los medios, tratar de contrarrestar esta información, porque no se vale lo que se está haciendo, porque no es verdad, hay que hacer un contraataque informativo para que se sepa que Guanajuato y sus municipios son seguros”.

A juicio de Burstein Campos, Guanajuato y San Miguel son dos de los municipios con los que fueron más incisivos al mencionar la inseguridad, pero se demuestra lo contrario, argumentó el entrevistado, con la reciente visita de la señora Hillary Clinton, en la reunión que sostuvo con la canciller mexicana Patricia Espinoza.

“Es un ruido, una mala información que están haciendo”, señaló pero aseguró que contrario a lo que se piensa tan es segura la capital que hasta tiene un correo electrónico donde los felicitan “por ser una ciudad segura, porque apapachamos bien a la gente que nos visitó y los dejamos hacer su trabajo”, añadió.

Hermano de la regidora Karen Burstein, el empresario restaurantero llegó a la presidencia de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), delegación Guanajuato, porque un grupo de agremiados pretendían hacer una nueva asociación quejándose del desempeño de Ricardo Herbert al frente del organismo.

Entre algunas de las inconformidades está el que, presuntamente, Herbert nunca envió la documentación a México para que se reconociera a la delegación de Guanajuato como parte de la propia Cámara. El nuevo representante de los prestadores de servicios en la capital comentó que su designación no fue por asamblea, pero sí un acuerdo de los 48 afiliados a la Canirac en el municipio.