Jorge Olmos Fuentes
Guanajuato, Gto. 05 de junio de 2011.- Dado que la recuperación de experiencias y de acciones específicas encaminadas a la conservación del Medio Ambiente es uno de los objetivos primordiales del Día Mundial del Medio Ambiente, viene bien traer hacer un mínimo recuento de hechos ocurridos en nuestro estado, protagonizado en este caso por la Asociación Civil Salvemos al Río Laja de San Miguel de Allende.
De acuerdo con el Ing. Agustín Madrigal Bulnes, director de la organización (entrevistado vía electrónica), se trata de una sociedad fundada en 1998, con el fin exclusivo de realizar actividades para la preservación de la flora y la fauna silvestre terrestre y acuática mediante el cuidado de la cuenca del río Laja, cuyo beneficio se extiende a ocho municipios de la parte alta del estado de Guanajuato. “Actualmente Salvemos el Río Laja A.C. tiene experiencia comprobada en lo que respecta a promover la vinculación entre comunidades rurales y programas de gobierno destinados a restauración ambiental, con vistas a la preservación del agua”, dijo el entrevistado.
Sus actividades de conservación, restauración y uso sustentable de los recursos naturales de la Cuenca Alta del Río Laja, desarrolladas por los habitantes de las comunidades rurales, se dirigen a revertir en el mediano plazo el daño ambiental, a promover una mejor calidad de vida en la región y a servir como modelo para otras áreas del estado, precisó Madrigal Bulnes.
Entre las acciones concretas de restauración que ha emprendido últimamente, se cuenta la gestión de un programa de restauración participativa en las comunidades de Cruz del Palmar, San Isidro Capadero, Espejo y Tierra Blanca; el apoyo para la siembra de 7 500 pirules en la ribera del Río San Marcos; la vinculación de la comunidad de Cruz de Palmar con SEMARNAT para una aportación de 2 700 jornales destinados a restaurar 4 Km con obras de conservación se suelo y siembra de 3 500 nopales y agaves; la vinculación de la comunidad de Cruz de Palmar y Tierra Blanca con CONAFOR para una aportación de jornales a los habitantes de la microcuenca que llevaron a cabo la restauración con obras de conservación se suelo, detalló el representante de Salvemos al Río Laja.
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