Carmen Pizano
Guanajuato, Gto. 18 de julio de 2011.- Uno de los sectores más vulnerables en la entidad es el de la industria ladrillera, que congrega a más de 12 mil personas que trabajan en los 2 mil 362 hornos que hay en Guanajuato en condiciones de alta marginalidad.
Con el objetivo de brindar una mejor condición de vida para las familias de quienes se dedican al sector ladrillero, se formalizó la firma de convenio donde participan 10 dependencias del gobierno estatal para el fortalecimiento de la industria y que haya menor contaminación.
El proyecto que se pretende impulsar en los 37 municipios donde se ubican los hornos de ladrillos, lo encabeza el Instituto Estatal de Ecología que busca la manera de impulsar los negocias, pero a la vez disminuir la contaminación que provocan los materiales de combustión.
Además también la Secretaría de Desarrollo Económico Sustentable juega un papel importante porque enseñaran a los ladrilleros a formar sus propios negocios sustentables.
“Hay tres grandes líneas de atención: la ambiental que obviamente es la más sensible para que tengamos una industria ladrillera que sea amigable con el medio ambiente; la parte social porque es un sector del cual se generan los autoempleos y son empresas familiares que viven a través de la tradición y la parte económica y vamos a estar trabajando en la parte tecnológica que nos ayude a que la industria se transforme hacia una orientación más amigable al entorno”, precisó el secretario de desarrollo económico, Ramón Alfaro Gómez.
El Instituto de Alfabetización y Educación Básica para adultos (INAEBA) también va a jugar un papel determinante al inscribir al sistema de educación a los ladrilleros que no concluyeron primaria o secundaria para que tengan los conocimientos básicos para impulsar su negocio.
En la firma estuvo presente Alfredo Villegas, vicepresidente de la industria ladrillera de la comunidad El Refugio, quien reconoció que su actividad es una de las más contaminantes para el estado, pero con este nuevo programa se podrán mejorar las condiciones laborales y ambientales.
“Somos la segunda fuente de contaminación en las ciudades y con todo el trabajo de Ecología hemos visto y hemos trabajado con ellos y nos hemos capacitado, el convenio repercute en muchos aspectos y ojalá que se lleve a cabo en el aspecto económico y de salud”.
En el proyecto también participa la Secretaría de Desarrollo Social y Humano para atender a las familias porque a decir de Miguel Márquez padecen en muchos hogares de violencia intrafamiliar.
Además la Secretaría de Salud estará pendiente para prevenir enfermedades comunes entre el sector como el reumatismo y la artritis.