EPIDRAMÓN
Javier Cardoso Estrella
28 de agosto de 2011
En estos días leí una nota muy interesante acerca de las fresas, pero no me refiero a las chicas de las universidades particulares, que ahora con el apoyo del actual gobierno andan más fashion. Hablo de esas frutillas rojas y exquisitas, las cuales valoré mucho cuando en el año de 1970 los futbolistas de la selección brasileña de ese tiempo entrenaron en nuestro querido terruño, y veíamos a estas estrellas en el centenario Mercado Hidalgo comprando canastas de fresas y comiendo de ellas directamente (en ese tiempo no se lavaban, y no hacían daño; ahora hay que desinfectarlas y comerlas, aunque ya Irapuato ha sido desbancada de la producción de fresa por otros lugares como Zamora, que lo único dulce son los chongos zamorano y que dicho sea de paso todo lo que ha dado es amargo, y Baja California cuyo sabor no conozco).
Esa lectura me causó sorpresa en virtud de que señala que estudios hechos a las fresas mostraron que contienen una sustancia de nombre “fiselina”, la cual ayuda a potencializar la memoria y ayuda mucho a contrarrestar los síntomas del mal de Parkinson y de Alzheimer ( ¡que feo tener un apellido así!). Y resulta que en una universidad de California han hecho estudios sobre este rico manjar, y que en pruebas con ratones de laboratorio y han dado magníficos resultados… todos los ratones se acuerdan de lo que los científicos les han enseñado, comentó un científico del CINVESTAV.
Dicen también que las fresas cosechadas entre noviembre y marzo son las mejores y más ricas en esta sustancia que ayuda a mejorar los males citados y que será ya probado en seres humanos (nos urge). Con esto mejoraríamos nuestro cerebro (digo pa’ mejorar lo que escribo) y la verdad es que en nuestro país existe mucha gente, sobre todo de la tercera edad, con problemas de este tipo. Aprovecho para enviarles una felicitación y escuchemos no solo a los de la familia sino a todos los que conozcamos, así nos damos una oportunidad de adquirir conocimiento y ellos ejercitan su musculo cerebral.
Como ya estoy a punto de pasarme de líneas, lo importante es decir que la fresa sirve para agilizar la memoria y, como sabemos, habemos muchos a los que se nos olvidan las cosas (a veces a propósito) y antes que se me vaya el avión va el epidramón:
En campaña puras promesas
hoy les toca cumplir compromisos
para recordar, buenas son “fresas”
aunque se acaben los “macizos”,
gobiernos y sus torpezas
pasan y van al olvido
yo por eso los convido
a que coman muchas fresas.