Carlos Olvera
Guanajuato, Gto., 06 de agosto de 2012.- Al referirse al caso de un maestro que fue llevado a barandilla por besar a su esposa, en la Plaza del Expiatorio, el dirigente estatal del PRI en la entidad, Javier Contreras Ramírez, reprobó la intolerancia y la mochería que sigue prevaleciendo en municipios como León.
Tras señalar que se sentía avergonzado de que de nueva cuenta los guanajuatenses vayan a ser juzgados como intolerantes, “por las actitudes de algunos mochos”, el líder tricolor señaló que los besos son manifestaciones espontáneas de amor, “completamente normales en la cotidianidad de las parejas”.
Contreras Ramírez acusó que no se puede pensar “que vivimos en una modernidad, evolucionamos en el progreso a través de carreteras, medios de comunicación, medios electrónicos y redes sociales como facebook y twitter y tenemos autoridades del siglo pasado, de la inquisición”, añadió.
De igual modo advirtió que este tipo de situaciones, “como afectó en su momento a Guanajuato (capital), cuando se levantó el escándalo del Callejón del Beso, en el gobierno de otro panista (Eduardo Romero Hicks)”, podría tener algún impacto negativo inclusive en el turismo que llega a la ciudad zapatera, detalló.
En el mismo sentido, con un sesgo criticó, indicó que no puede ser que la gente de León sea tan mocha y tan mojigata “y no me refiero a la población sino a las autoridades; que no pueden seguir pensando de esa manera”, apuntó. Contreras Ramírez aseguró que los guanajuatenses “no son así, sino son gente normal y pensante, con la evaluación normal”.
En contraste mencionó que ahora que llegue el nuevo gobierno, encabezado por Bárbara Botello, espera poder influir en el Ayuntamiento para evitar este tipo de temas. “Bárbara tiene una forma de pensar diferente, vendrá un cambio de mentalidad en la que estamos seguros va a ser basada en el respeto absoluto a la voluntad de la gente, hay que respetar a las personas que se dan un beso libremente como una muestra de afecto y de amor”, concluyó.
