Literaria

El guion cinematográfico

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Literatura dentro del cine

El cine es considerado como el séptimo arte, esto porque dentro de su composición se encuentran presentes todas las otras artes, como por ejemplo el teatro, las artes visuales, la música y por supuesto entre ellas está la literatura.

El teatro se encuentra en el trabajo escénico que realizan los actores, las artes visuales como la pintura y la arquitectura se reflejan en el diseño escenográfico de la película, la música es la parte ambiental esencial de la creación fílmica y la literatura la encontramos presente mediante el guión cinematográfico.

Antes de comenzar toda producción de una película, la idea principal en la que se basará debe ser presentada a los productores plasmada en papel, esto implica un gran trabajo principalmente de un escritor capaz de transmitir las ideas por medio de palabras, tan claramente que puedan ser transformadas en imágenes tanto por quienes producirán la película así como por quienes la interpretarán.

Un buen guión de cine debe contener una descripción exacta del transcurso de los sucesos de la película, los lugares en los que éstos ocurrirán, la cantidad exacta de personajes principales, secundarios y actores extra que necesitará cada cuadro fílmico, así como las emociones y carácter que los actores deben desarrollar para darle vida a los personajes.

De hecho, el guión cinematográfico se compone de tres etapas que van nombrándose según los momentos de realización de una película, el primer guión, en el que se presenta a los productores la idea original del escritor, se llama precisamente, guión literario, una vez que éste es leído y modificado de acuerdo a las observaciones de un productor y director, pasa a llamársele guión de rodaje, el cual da pie a la última y tercera etapa en la que el director crea un guión base para realizar más fácilmente cada plano de la película, éste último es mucho más simple y sólo el director y sus asistentes hacen uso de él, mientras que los dos anteriores son la base en la que los actores, vestuaristas, maquillistas y escenógrafos se soportan para realizar el material visual de la película y una interpretación adecuada a la idea del escritor y productores involucrados en el guión.

Sin duda alguna cuando vemos una película, sea del género que sea, nos adentramos en ella, conocemos su historia, y nos dejamos llevar por ella como si se tratara de una ventana a la vida real de otros individuos que no somos nosotros, al final tratamos de encontrarle a ésta una identificación con nosotros mismos, o incluso un motivo para que nos guste o disguste.

En la actualidad el cine es uno de los principales medios de recreación en el mundo, sin embargo cuando asistimos a ver una película rara vez nos interesa pensar en dónde es que surgió esa idea originalmente, nos quedamos sólo con la combinación de todo y decidimos si nos agrada o no el resultado que vemos en pantalla.

Ante esto es importante saber que la trascendencia de la literatura es magnífica, pues es la base creativa de una de las modalidades de entretenimiento más redituables a nivel mundial, toda película para realizarse necesita un guión literario original, proveniente de las ideas auténticas de un escritor hábil para transmitir imágenes por medio de la palabra para así facilitar una buena interpretación de los actores, un buen trabajo de escenografía y un claro entendimiento al director de escena.

En pocas palabras el cine no sería posible sin la existencia de la literatura.

Una vez más nos damos cuenta de que el trabajo literario es responsable de muchas más cosas que sólo escribir libros y que la literatura implica cientos de géneros que muchas veces en la cotidianidad,  no nos damos cuenta de que existen como tales y que incluso están presentes donde menos lo imaginamos.