Celaya, Gto. 18 de febrero de 2013.- Para investigar a sus víctimas, ahora los delincuentes se hacen pasar por vendedores, médicos, enfermeras, monjas, sacerdotes, fotógrafos o prestadores de servicio para obtener información en hogares y después cometer robos.
La Procuraduría de Justicia del Estado advirtió sobre estas prácticas a través de un comunicado de prensa e hizo un llamado a la prevención, a través de diversas medidas.
Una de ellas es evitar abrir la puerta de la casa cuando alguien toque o timbren y cerciorarse de quien es la persona instalando mirillas o ventanilla en la puerta de acceso.
También induce a los padres de familia a inculcarles a los menores no abrir la puerta de acceso bajo ninguna circunstancia ni entablar conversación con personas extrañas.
La PGJE recomienda mantener las puertas siempre cerradas y si es posible utilizar doble cerradura.
No abrir el domicilio familiar a personas desconocidas hasta no estar seguro de sus intenciones.
Colaborar con los vecinos en la vigilancia de la colonia y avisar a las autoridades correspondientes sobre la presencia de personas desconocidas rondando de manera sospechosa en las cercanías de cualquier lugar.
No dejarse sorprender por personas extrañas que simulan pertenecer a instituciones o dependencias públicas que ofrecen servicios gratuitos o comunitarios, solicitan información y el ingreso a tu casa, así como personas que se ostentan como vendedores e investigadores de crédito.