Falta señalética. Ya muchos turistas se han quejado de esto, pero igual los proveedores de los insumos que utiliza la población, ya que con nuestras calles serpenteantes y estrechas y túneles oscuros, vericuetos, callejones que antes solo los usaban los burros (me refiero a los asnos, pollinos, zapa, de los de cuatro patas y que rebuznan) que cargaban leña, material para construcción, agua, carbón, leche. Y precisamente hablando de transportar leche, uno de estos vehículos que transportan lácteos se quedó atorado al entrar al pequeño túnel ubicado debajo de la plazuela de Los Angeles. El joven e inexperto conductor ignorante de lo que es transitar en nuestro Guanajuato o víctima de la broma de sus compañeros que seguramente pasaron por las mismas, sufrió el atorón de su vida que hasta la leche se le cortó. Y es que como lo comenté al principio, hace falta señalética adecuada y visible para los que nos movemos en esta ciudad. Y es que ahora vemos unidades de motor por todos lados en los cuales solo los burros llegaban, ahora llegan otros con más caballos de fuerza, pero con el riesgo de darse un atorón. Así que hay que solicitarle muy amablemente a nuestro H.H.H.H.H. Ayuntamiento, y estrenando Director de Turismo, que se lleven a cabo las acciones necesarias para proporcionar información a visitantes y locales.

*

Ya no es cuento urbano

Que hay tráfico embotellado

Porque en un túnel enano

Quedó un camión atorado.