El arte nace desde los pies

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Guanajuato, Gto. 06 de octubre de 2013.- Si se preguntara a José Gerardo Uribe Aguayo a cuál de las artes no se ha dedicado le sería difícil contestar. Y es que a lo largo de su vida ha sido actor, pintor, conferencistas, filosofo, docente y en la actualidad es postulante al Doctorado en Artes, en la Universidad de Guanajuato.

Pero Gerardo no es un artista común y corriente, sino que es miembro de la Asociación Mundial de Artistas con la boca y con el Pie, con sede en el Principado de Liechtenstein, en Europa. Trabaja con acuarela, óleo, tinta china y técnicas mixtas, entre otras.

Algunos lo han comparado con  Nick Vujicic, quien se dedica a dar conferencias motivacionales para enseñar a la gente a vivir, porque no tiene brazos ni piernas, pero Gerardo afirma que eso no es para él.

“Me gusta más la filosofía y otras cosas, para salir adelante”, aunque reconoce que ha dado conferencias no le gusta “porque son muy recias, sobre todo porque soy muy rudo y muy directo para decir las cosas, entonces no se me da”, comenta.

“Creo que si tienes un problema tienes que pensar en cómo resolverlo y punto. Enfréntalo y obsérvalo con toda la realidad posible y ya. A lo mejor lloras, pataleas,  sufres por lo que estás viviendo pero con el tiempo te das cuenta de que todo tiene una solución”.

Gerardo prefiere pintar con los pies que con la boca, porque eso le da una perspectiva más adecuada de la obra y de hecho son su instrumento y  su forma de comunicación por lo que le ha dedicado a sus pies una de sus obras más importantes: “Visión Transformadora”.

Gerardo nació en Dolores Hidalgo Cuna de la Independencia Nacional, pero se adoptó en Guanajuato. Tiene familia en ese municipio, Querétaro, San Luis Potosí y en Celaya y todos están regados y ninguno vive en Guanajuato. “Mi familia es la comunidad de artistas e intelectuales de la ciudad”, asegura.

Considera que la gente no solo de Guanajuato, sino en todas partes tiene actitudes discriminatorias,  pero los disculpa señalando que no son así por naturaleza, sino que les llama la atención y no entienden lo diferente y  cuando escucha una mala broma en torno a su condición, utiliza el ingenio para defenderse y no molestarse por ese tipo de cosas.

“Son mecanismos de defensa que tiene que aplicar cuando algún niño te avienta piedras o se burlan de ti, los niños tienen que aprender a abrir la boca, pero no para decir lo que no se debe, no le puedes decir a una señora que está fea o vieja, o gorda, ¡qué horror! o a un señor: que viejo tan pelón y panzón, tienen que aprender a hablar con prudencia”, añade.

Sin embrago,  Gerardo se  mueve por el mundo como si nada, aunque dice que tiene aún cientos de obstáculos como los escalones, y si hay una caída cuesta mucho levantarse, los más difíciles son la incomprensión de la gente hacia lo diferente.

Este pintor sorprendente explica que su condición diferente es por causas congénitas sin nombre médico, “antes del nacimiento hubo la mutilación de brazos y parte de las piernas, el muslo no aparece porque se juntó la rodilla con la cadera”.

A la fecha ha publicado artículos, algunos fragmentos de su tesis en libros,  obra publicada en libros y revistas de México y el mundo, conferencias del arte en general.