Guanajuato, Gto. 09 de diciembre de 2013.- Miguel Márquez se mantuvo al margen de comentarios sobre la sucesión de la dirigencia nacional de su partido, pero manifestó que se debe de respetar al que gane, al ritmo de José Alfredo Jiménez como dice su canción.
“Yo estoy haciendo lo que me toca como gobernador de los guanajuatenses, mientras que la sucesión es un proceso que le corresponde a la dirigencia nacional” manifestó, aunque en su momento él tomará la decisión y como cualquier otro panista acudirá a votar.
El gobernador del estado quien se definió como un militante de cepa con más de 25 años de militancia, exhortó a no olvidar que el PAN es un partido de ciudadanos, “que se formó como ciudadanos y no nació del poder” en alusión al PRI.
“El panismo obedece a una lógica ciudadana y es un medio para que a través de él los ciudadanos puedan tener bienestar y un bien común para todos”.
Indicó que el PAN tiene un gran sentido de responsabilidad porque se hizo en la democracia, en medio de debates duros, ásperos y difíciles al interior y eso fue la constante de Acción Nacional, y así lo conoció el propio Márquez desde su niñez.
“Pero también es cierto que se privilegiaba el interés en este caso de Guanajuato y de México, y ese debe estar por encima de cualquier interés de cualquier panista”, enfatizó.
Dijo que más allá del debate y de los posicionamientos discursivos el interés ciudadano y del país debe estar por encima de los intereses del partido, por lo que invitó a los panistas a que una vez que se defina la dirigencia nacional la apoyen de manera decidida.
“Una vez decidido el proceso se respeta al que gana, como dice la canción, y que nos centremos en ese apoyo institucional”, añadió.
Márquez declinó manifestar su opinión al arranque de la campaña del ex gobernador Juan Manuel Oliva en el Estado de México porque es un tema que corresponde observarlo al partido.
