Guanajuato, Gto. 04 de junio de 2014.- El titular de la Dirección de Desarrollo Urbano del municipio, Sergio Knapp Aguilar, garantizó que entregó los permisos para hacer una ampliación de 32 habitaciones del Hotel Camino Real a las autoridades correspondientes, para derribar parte de un muro perimetral del inmueble, para que introdujeran el material.
Aún así, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y los empresarios se encuentran en discordia, porque el instituto mandó poner sellos de suspensión en el muro, e incluso ya presentó una demanda ante la Procuraduría de Justicia del Estado (PGR), por desacato, pero las obras continúan.
Knapp Aguilar mencionó que presuntamente los empresarios respondieron con otra denuncia en contra del INAH.
Explicó que ellos dieron la autorización siempre y cuando al término de los trabajos se rehiciera el muro referido en las mismas condiciones en las que estaba.
Comentó que los empresarios del hotel se acercaron con ellos para tramitar los permisos y no se objetó porque cumplieron con todos y cada uno de los requisitos.
“En su momento ellos nos pidieron la demolición de un muro para poder meter el material sin interferir en la operación del propio hotel y también se les dio”, explico.
Aseguró que no se trata de un muro que sea antiguo o del siglo XIX, sino que es un muro que está construido con el sistema que se utilizaba en los años sesentas y que no representa ninguna situación de conservación del patrimonio.
En este sentido, comentó que ellos cuentan con evidencias de que se trata de un muro moderno, además de que está fuera de la poligonal que marca el INAH, como la conservación de sitios y monumentos.
El funcionario dijo que son muy respetuosos de las determinaciones del INAH y no se meten en su ámbito, ellos harán lo conducente y los inversionistas harán lo que les beneficie.
Finalmente, comentó que el tema se resolverá en los tribunales, porque dijo, se ha enterado por algunos medios, que los empresarios también recurrieron a acciones legales.
