Guanajuato, Gto, 30 de junio del 2014.- No hay controversias con la Delegación del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y autoridades municipales, aseguró el director de Desarrollo Urbano, Sergio Knapp Aguilar.
Y es que se presume que las opiniones contrarias generadas por las obras de ampliación que se desarrollan en el hotel Camino Real, generaron diferencias entre ambas autoridades.
Sin embargo, el funcionario estatal señaló que a la fecha no han sido llamados por ninguna autoridad, para declarar en torno a la autorización que dio el gobierno de la capital, para derribar alrededor de seis metros de muro perimetral del mencionado hotel, para la introducción de material y la edificación de 32 nuevas habitaciones.
“Nosotros estamos muy atentos y en el momento en que la autoridad judicial nos llame, si es que ocurre, estaremos con la mejor disposición de aportar las bases en las que nosotros otorgamos esas licencias”, subrayó.
Según el delegado del INAH, Sergio Tovar Alvarado, se trata de la ex hacienda de beneficio de San Javier, por lo que le correspondería a esa institución dar la autorización una vez que se presentara el proyecto, por lo que clausuró la obra, aunque los albañiles siguieron trabajando. Esto motivó que el INAH demandara a los propietarios de inmueble y a su vez ellos demandaran a la dependencia federal.
Knapp Aguilar dijo que ellos ya se reunieron con personal técnico del INAH y les explicaron las razones legales con base en los cuales otorgamos el permiso para dos licencias una para la construcción de 32 habitaciones y la otra para la demolición de un tramo de aproximadamente seis metros, para la introducción de material.
El funcionario aseguró que esos permisos se otorgaron con base en la normativa y al análisis que se realizó a conciencia y de manera profesional.
