Guanajuato, Gto. 05 de febrero de 2015.- El director general de Liconsa, Héctor Pablo Ramírez Puga Leyva, anunció una serie de acciones para terminar con cualquier indicio de corrupción luego de la denuncia que hizo el gobernador Miguel Márquez de que productores lecheros de Guanajuato estaban siendo víctimas de moches por parte de personal de institución lechera.
Ramírez Puga Leyva reconoció que esa denuncia provocó el despido del coordinador estatal de centros de acopio, Víctor Morán. Esto lo dijo en entrevista al término de una reunión que encabezó el propio mandatario estatal y en la que participó también el secretario de Desarrollo Agroalimentario y Rural, Javier Usabiaga Arroyo, así como ganaderos de la entidad.
A la vista de los hechos, el gerente nacional de Liconsa manifestó que le ha ofrecido al gobernador no la revisión de un centro de acopio, sino de todos los que hay en la entidad para verificar la situación; revisar la relación institucional con los ganaderos, para que tengan certeza del convenio de compra del producto una línea de teléfono para denunciar.
“Estamos proponiendo entre otros puntos que haya una línea gratuita de denuncia anónima, por cualquier tipo de anomalías que se detecte y trabajar de a mano con el gobierno estatal, para depurar la lista del padrón de productores, para saber quiénes son los verdaderos productores y beneficiar a los pequeños productores y no a los intermediarios”, enfatizó.
Tras señalar que “fue una reunión muy productiva que va a clarificar la relación de Liconsa con los productores”, el gerente nacional dijo que en adelante tendrán que trabajar de manera tripartita con la Confederación Nacional Ganadera, la estatal ganadera, con el secretario del ramo y con Liconsa para saber a ciencia cierta a quién se le compra la leche y cuántos litros dependiendo de los recursos de la dependencia.
