Modelo ético, eje de universidades: Romero Hicks en la UG

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Guanajuato, Gto. 10 noviembre de 2016.- Ante investigadores de México y de otros lugares del mundo, el ex Rector de la Universidad de Guanajuato, Mtro. Juan Carlos Romero Hicks, sostuvo que hay una crisis en la educación, pero sobre todo en los fines de ésta, por lo que es momento de hacer una renovación de los valores, pues es en las universidades donde pueden gestarse soluciones a los grandes problemas del entorno.

Senador Juan Carlos Romero Hicks (Foto: UG)
Senador Juan Carlos Romero Hicks (Foto: UG)

El presidente de la Educación Superior en el Senado de la República dictó la conferencia “Educación Superior en el siglo XXI, reflexiones para enfrentar un mundo en movimiento”, en el marco del Congreso Internacional de Análisis Organizacional, que tiene como sede a la Universidad de Guanajuato.

Declaró que la Universidad es una institución que debe cambiar constantemente y se refirió a los procesos que impactan la educación, específicamente la globalización y la digitalización, también recordó que, de acuerdo con los planteamientos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), es necesario: aprender a aprender, aprender a hacer, aprender a ser persona y aprender a convivir juntos.

En ese sentido, consideró factores clave para una universidad de calidad el contar con un modelo educativo que tenga como centro a la persona, excelentes profesores investigadores, alumnos emprendedores e innovadores, una infraestructura adecuada, un sistema de financiamiento, un modelo de vinculación, una adecuada gestión y administración, estar orientada a la internacionalización, y sentenció: “El nombre del juego es innovar, pensar en lo que nadie ha pensado”.

Desde su perspectiva, la universidad debe concebirse en red, no como un ente aislado, y poner especial énfasis en la vinculación, pues le corresponde enfrentar los grandes retos que el entorno plantea. También se pronunció por acortar la brecha entre empresa y universidad, aunque aclaró: “la Universidad no puede estar al contentillo del mercado de trabajo”.

Al reflexionar sobre cómo pueden las universidades participar en la solución de los problemas, habló de integrar la educación básica y la superior, y de la necesidad de cambiar la idea de que educar es estar en la escuela: en el contexto actual, están cambiando los modelos de aprendizaje “en el mejor de los casos, el profesor es el alumno más aventajado”, sostuvo; por tanto, el profesor ahora es visto más como un facilitador y los espacios de aprendizaje ya no se limitan a las aulas.

Pese a las transformaciones que el siglo XXI demanda, el ex Rector de la UG consideró que hay principios que deben retomarse: la verdad, la libertad, y el amor “a la educación, a la persona, a la educación, al país”, concluyó.