Guanajuato, Gto. Luego de dos años donde se intensificaron los casos de COVID-19, alumnos de educación básica que sufrieron ataques de ansiedad y depresión por el confinamiento, todavía siguen sin recuperarse, advirtió el secretario de Educación de Guanajuato, Jorge Enrique Hernández Meza, por lo que continúan bajo observación por parte de sus maestros.
Explicó que Guanajuato es la única entidad que hizo una medición de los alumnos para conocer el estado de depresión y ansiedad durante el periodo fuerte de la pandemia, para poder brindarles atención médica en coordinación con las dependencias correspondiente.
El secretario de Educación, dijo que los procesos socioemocionales son los principales factores para el aprovechamiento de los alumnos, sin embargo, no se ha presentado en el estado un rezago educativo, debido a que son auxiliados por sus maestros.
Mencionó que la Secretaría de Educación de Guanajuato en coordinación con el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, secciones 13 y 45 y con asesoría de la oficina regional para América Latina del Banco Mundial, desde el año pasado inició la Recopilación de Información para la Mejora de los Aprendizajes (RIMA) que es un instrumento que permite evaluar los aprendizajes en las asignaturas de español y Matemáticas, además de las habilidades socioemocionales del estudiantado.
Dijo que el objetivo del estudio recopilar información válida, confiable, útil y accesible, sobre los aprendizajes de los estudiantes con el fin de proporcionar insumos de mayor precisión a la comunidad educativa, bajo un enfoque de mejora continua.
Por último, Hernández Meza, dijo que en Guanajuato se transita de una educación de antes, hacia una educación después de la pandemia generada por el COVID-19, situación que sigue implicando retos mayores, donde la labor educativa debe continuar, dando prioridad a la salud de estudiantes, maestras y maestros, padres y madres de familia y de toda la comunidad educativa.