Benjamín Pacheco López
Guanajuato, Gto., 18 de octubre de 2011.- Los músicos de la Orquesta Sinfónica de la Universidad de Guanajuato (OSUG) dedicaron el concierto de Gustav Mahler a la memoria del periodista Miguel Ángel Granados Chapa, fallecido el pasado 16 de octubre.
Lo anterior se dio a conocer de manera previa a la presentación realizada en el Teatro Juárez, donde las autoridades del FIC anunciaron que la “Sinfonía No. 9 en re mayor” estaría dedicada a quien recibiera en 2008 la Medalla Belisario Domínguez (por su lucha en pro de la libertad de expresión) y estuviera ligado durante más de 30 años a medios como Excélsior, Proceso y La Jornada.
El concierto, encabezado por el maestro Enrique Bátiz Campbell, fue acorde con el homenaje póstumo, pues es sabido que Mahler lo compuso antes de su muerte y algunos estudiosos han apreciado en la pieza un “adiós a la vida” por parte del director bohemio-austriaco.
Dicha sinfonía está caracterizada por cuatro movimientos: “Andante comodo”, “Im Tempo einesgemächlichen Landlers”, “Rondo-Burleske: Allegro assai” y “Adagio”.
Para los expertos es considerada como la mejor composición mahleriana, además de que musicalmente está inspirada en la “Sinfonía nº 6 Patética” de Tchaikovsky, y que aparentemente es un réquiem hecho por Mahler para su difunta hija María.
Bajo este marco, Bátiz dirigió un concierto asociado a la muerte —condición que al parecer siguió a Mahler durante distintos aspectos de su vida—, donde el primer movimiento comienza de forma arrítmica e irregular, suave, ligada a un halo de desesperanza, que algunos asocian a la precaria condición cardiaca del compositor.
En contraste, los dos movimientos siguientes son más lúdicos: parecidos a una danza y una marcha militar, según se ha analizado. Y el cuarto movimiento, pareciera atraer la redención, donde son notorias las referencias al descanso y la vida eterna.
Tras concluir el concierto, Bátiz —con su peculiar estilo— reconoció el trabajo individual y en conjunto de los músicos, mientras el público lo ovacionaba de pie.
El concierto también destaca porque la OSUG se integra al recuerdo de Gustav Mahler en su centenario luctuoso (1860-1911), personaje que sufrió mucho en vida y a quien el filósofo alemán Thedodor Adorno incluyó en su ensayo “Monografías musicales”, donde llegó a considerar que en el primer movimiento de la sinfonía se escuchaba “la respiración fatigada del narrador”.