Literaria

¿Qué fue primero?, ¿El libro o la película?

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Coraline de Neil Gaiman, opciones de literatura para niños

Muchas veces es complicado separar la literatura infantil de los clásicos cuentos de hadas que los niños escuchan tanto de sus padres, abuelos, maestros y todos los demás adultos que les rodean; de tal forma que cuando llegan a su edad lectora cuesta hacer que los niños se interesen en acercarse a un libro, pues toda la literatura clasificada como “infantil” ya la conocen de sobra y no manifiestan la menor intención en acercarse mucho a estos libros para niños puesto que “ya se los saben”.

Es importante tanto para los padres como para los maestros de niños en edad escolar contar con sugerencias y nuevas opciones que den a los pequeños la oportunidad de acercarse a la lectura y crearse un hábito con la misma, una vez más contamos con una buena opción de literatura actual y que además es un buen ejemplo de literatura en el cine.

Se trata de la novela corta Coraline, del escritor británico Neil Gaiman, quien en el año 2002 publicó dicha novela mediante Bloomsbury y Harper Collins. Esta novela desde su publicación fue objeto de buenas críticas y un año después fue ganadora de múltiples premios por su calidad.

El argumento de la novela se caracteriza por una buena mezcla entre el género de terror y de fantasía, con una notable influencia de Lewis Carroll. Desarrolla la historia fantástica de una pequeña niña llamada Coraline quien es víctima de la desatención de sus trabajadores padres; por lo que para evadir su soledad, opta por ocuparse explorando el nuevo edificio a donde se ha mudado, conociendo a cada uno de sus vecinos, haciéndose ideas particulares sobre ellos, jugando (o intentándolo, al menos) con un gato que ronda los alrededores del edificio, etc.

Cuando de pronto Coraline se da cuenta de que ya no le queda más por explorar ni ningún otro vecino por conocer, dentro de su propia casa Coraline descubre una puerta que al abrirla muestra solamente una enorme pared de ladrillos; cuando pregunta a sus padres respecto a lo que podría haber tras esta pared, su madre le contesta que sólo es un apartemente vacío.

La curiosidad de Coraline excede esa respuesta y al día siguiente vuelve a abrirla; cuando se da cuenta de que algo ha cambiado; la pared ya no está y entonces tiene acceso libre al apartamento contiguo. Es ese momento en el que la historia de la pequeña niña sola comienza a cambiar. Enfrentándose a un mundo paralelo con diferencias sustanciales pero físicamente idéntico al suyo, Coraline empieza a experimentar múltiples confusiones y a buscar cada vez más respuestas que definitivamente no le gustarán.

El carácter misterioso de la historia de este libro, la intriga y la perfecta verosimilitud con la que está escrita logró llevarla al cine en el año 2009; respetando bastante el argumento original del libro y creando un filme perfecto para niños y no tan niños, la difusión y popularidad que causó la película en Latinoamérica ocasionó que el libro tuviera bastante difusión en México ya que anteriormente no era conocido, así como la adaptación a novela gráfica que se realizó en el 2008.

La popularidad alcanzada por la historia a través de la pantalla grande hace que hoy en día este valioso, interesante y creativo texto para niños sea muy fácil de encontrar; por lo que representa una alternativa perfecta para enseñar a los pequeños el hábito de la lectura mediante un texto relativamente nuevo con el que podrán identificarse rápidamente ya que fomenta la curiosidad y la imaginación sin ser uno de los clásicos cuentos que ya desde la primera infancia lo pequeños escuchan sin parar.

El argumento que la novela corta Coraline puede aportarles desde el punto de vista literario, puede ser el anzuelo perfecto para enganchar a los pequeños en edad escolar al hábito lector y al mismo tiempo les permite vincular desde temprana edad la relación artística entre la literatura y el cine.