Comida de Guanajuato

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(Foto: Archivo)
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La gastronomía guanajuatense es una de las delicias más exquisitas que la capital tiene y de la que se puede disfrutar en cualquier rincón o callejón de Guanajuato.

Su comida es tan única y rica, tanto que el asombro de los foráneos, al momento de conocerla, es sorpresivo e ingenuo, es principalmente con los nombres que estos platillos tienen.

Al platicar con Guillermo, turista proveniente de la Ciudad de México, dijo que entre las cosas que más le impresionó fueron los túneles de Guanajuato y su comida.

“Nunca había venido a Guanajuato, me platicaban mucho de este lugar… ahora que estoy aquí me quedé enamorado de la ciudad, es hermosa y sus túneles me causan mucha curiosidad y no quiero salir de ellos, pero cuando escuché de la comida y de las guacamayas no supe qué decir, no sabía qué era y si me estaban bromeando con eso”, explicó Guillermo.

La guacamaya es una torta de chicharrón a la cual se le pone aguacate, huevo cocido, limón y salsa de guacamaya, la cual es hecha con jitomate chile, cebolla y especias.

Si bien no es una comida típica de Guanajuato capital, ya que esta original comida se conoció en León, Guanajuato, ahora goza de gran popularidad en la capital y es del gusto de muchos residentes y turistas.

El platillo más popular, tanto en las calles como en restaurantes de Guanajuato, son las enchiladas mineras.

Este platillo guanajuatenses se distingue por su sabor y su nombre: se preparan friendo las tortillas con una salsa roja, posteriormente se rellenan de queso panela con cebolla.

En el exterior se complementan con papas y zanahorias cocidas, lechuga y crema al gusto.

Las enchiladas mineras varían de presentación dependiendo del gusto de la gente, en algunos lugares le ponen chiles en vinagre, en otros las acompañan de una pieza de carne o pollo.

Al preguntarle a una turista sobre la comida guanajuatense, Mercy, quien es originaria de Texcoco, dijo que la comida de Guanajuato tiene un sabor muy peculiar.

“Es muy rara la comida en el buen sentido, hasta el arroz me sabe diferente, pero me gusta porque el probar cosas nuevas siempre son una experiencia… las enchiladas mineras definitivamente tienen ese toque diferente a las enchiladas normales que siempre como y me gustaron así como las guacamayas y los dorilocos, esos no los venden en donde vivo”, expresó.