Ocupaban toda la lateral de la calzada hasta donde la vista alcanzaba avanzando a pie, en bicicleta, empujados en una silla de ruedas, en remoques o carriolas, apiñados en “tortons” y tráilers, algunos más cómodos en autos de todos tamaños y tipos, había desde niños de brazos hasta ancianos ondeando sus canas al sol, en un flujo que parecía no tener comienzo ni fin.
La virgen, morena como todos, ocupaba el lugar principal, el destino, el camino, el combustible y el pegamento de esa masa heterogénea que tan solo se desplazaba hacia el frente, recibiendo de manos de otros penitentes, sin pagar por ello café, pan dulce, agua, refrescos, tacos de muchos tipos, nieves para el calor, frutas para el camino y sobre todo una sonrisa cómplice que decía sigue avanzando y que llegues bien.
Y uno que nunca ha caminado, ni conoce a nadie que lo haga y que parece fijarse más en los cerros de basura que se van formando, en los riesgos que se toman, en el tiempo supuestamente perdido, el ruido de los cuetes y en el aparente caos que provoca su peregrinar se pregunta ¿Por qué van?
Las explicaciones más comunes de aquellos que se proclaman “racionales” analizan el fenómeno desde diferentes visiones: los amantes del progreso dirán que es atraso e ignorancia; los individualistas los llaman borregos; una visión más de izquierda puede proponer que están manipulados y que la religión es el opio del pueblo y los católicos de librito solo dirán que es fanatismo y que mas valía asistir a misa cada domingo.
Sin meternos en discusiones en espiral sobre lo veraz de la aparición, que es un tema aparte, o sobre cada motivo personal agradecimiento o petición yo considero que peregrinan, aun sin saberlo, para ser y pertenecer pues la nueva identidad nacional, después de un complejo proceso de conquista, fue unificada con la Virgen (si no pregúntenle al cura Hidalgo) y al ser con los demás perteneces, a tu familia, a tu cuadra a tu pueblo o tu país.
Puede parecernos poca cosa aquello de pertenecer, pero pensando en una realidad donde la verdadera ayuda viene de la solidaridad de tus iguales, se convierte en una cuestión de supervivencia. Si no creían en los milagros aquí les presento uno.
