Guanajuato, Gto. 07 de junio de 2017.- Actualmente la Ley General de Salud no especifica que un donador fallecido no pueda donar sus órganos a un paciente menor de edad sin embargo en el Sector Salud, la práctica es que ninguna persona adulta que haya muerto y decidido donar sus órganos pueda darlos a un menor de edad que lo necesite.
En Guanajuato y específicamente en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) hay un paciente que espera desde hace siete años. Cuando lo pusieron en lista de espera tenía 10 años hoy tiene 17 y aún no ha podido recibir un trasplante de riñón.
Como él otros 83 niños requieren un trasplante de riñón pero como la práctica sigue siendo la misma estos niños podrían tardar en promedio dos años y medio para poder tener acceso a este procedimiento.
Sin embargo, con una iniciativa de reforma a la Ley General de Salud en materia de trasplante de órganos y tejidos que se analizó en un foro ciudadano en el Congreso del Estado se busca que esta “costumbre” cambie.
Rodrigo López Falcony director de Centro Estatal de Trasplantes de la Secretaría de Salud de Guanajuato (SSG) señaló que en los últimos cinco años, en Guanajuato han fallecido al menos 200 niños por no haber podido recibir un trasplante, este reporte se da a través del registro nacional de trasplantes donde los pacientes causan baja principalmente por defunción.
“En ningún artículo de la Ley General de Salud se prioriza el trasplante a niños, solamente existe una artículo en el reglamento, en el cual los dice que los donadores pediátricos van a ir para receptores pediátricos, esto ha hecho que en nuestro país pacientes pediátricos no reciban órgano de donadores mayores de 18 año y esto sin duda los ha dejado en desventaja ya que no se trasplantan a tiempo”, puntualizó.
Y señaló que en Guanajuato existen mil 442 pacientes adultos que también esperan la donación de un riñón, cifra que aumentó con respecto al pasado 2016, cuando se registraron mil 298 personas en espera de un órgano. Una persona con problemas renales tiene una esperanza de vida de solo cinco años, después de haber sido diagnosticado con este padecimiento.
